Software libre, mucho más que cuenta de cuatro frikis

Leturia Azkarate, Igor

Informatikaria eta ikertzailea

Elhuyar Hizkuntza eta Teknologia

El término "software libre" recordará a la mayoría de la gente Linux, un sistema operativo extraño que algunos informáticos dicen utilizar en lugar de Windows. Y aunque es cierto que el software libre comenzó a divulgarse con Linux y se hizo popular, hoy en día el movimiento del software libre es mucho más. Tanto que sin él el mundo no sería como hoy lo conocemos.
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Tux, logo de Linux. El movimiento del software libre comenzó a difundirse con Linux, pero hoy en día es mucho más. Imagen: “Larry Ewing”, “Simon Budig”, “\}”

Los ordenadores, como muchas otras tecnologías, han tenido una larga historia antes de extenderse a toda la sociedad, más larga de lo que creemos. Nacieron en el mundo académico-universitario. A principios del siglo XX y a partir de la década de los 80 se empiezan a convertir en usos globales. Mientras tanto, en esta época entre los años 50-80, las computadoras eran máquinas grandes y caras, y sólo estaban en universidades y grandes empresas. En cuanto al software que se hacía para ellos, era habitual que se difundiera y distribuyera gratuitamente y libremente, que se hiciera aportaciones al software de otros... Por un lado, porque siempre ha sido costumbre publicar y compartir descubrimientos en el mundo académico; por otro, porque los productores de ordenador también veían con buenos ojos que los programas que hacían más útiles sus carísimas máquinas fueran gratuitos y accesibles. Hacker fue filosofía y época.

Sin embargo, en 1980 la ley de copyright se extendió al software. Y debido a la expansión que estaban teniendo las computadoras, el software se convirtió en una oportunidad de negocio y surgieron empresas de software que vendían únicamente el código binario o compilado del software, no el código fuente.

Ante este nuevo panorama, Richard Stallman, del Laboratorio de Inteligencia Artificial del MIT (Massachusetts Institute of Technology), abandonó la organización y fundó la FSF (Free Software Foundation o Fundación del Software Libre), con el objetivo de recuperar la filosofía del hacker que conoció e impulsar el software libre. En su opinión, el software debe ser libre, porque cree que compartir conocimiento es imprescindible para que la sociedad avance y, por otro lado, ser libre permite realizar programas de mejor calidad.

Pero ¿qué es exactamente software libre? Definición publicada por la FSF en 1986 por Stallman. Un software es libre si su usuario tiene cuatro libertades (utilizando la numeración desde el 0 habitual en informática):

0 libertad: libertad de ejecución del programa sea cual sea su finalidad.

Libertad 1: libertad de analizar el programa y adaptarlo a las propias necesidades.

Libertad 2: libertad de copia del programa y de distribución de copias.

Libertad 3: Libertad de mejorar el programa y de difundir la versión mejorada para que todo el mundo se beneficie.

Richard Stallman, fundador de la Fundación Software Libre FSF. Ed. Gisle Hannemyr/Creative Commons/confesar y compartir bajo la misma autorización

Para garantizar estas libertades es necesario que el código fuente de los programas sea abierto. Por otro lado, además de la definición de software libre, FSF y Stallman dieron a conocer el concepto de copyleft (mantener la disponibilidad en caso de modificar o mejorar el software que se distribuye libremente) y inventaron la primera licencia de distribución de software libre por copyleft (GPL o General Public License).

Stallman también puso en marcha el proyecto GNU, cuyo objetivo era disponer de todo el sistema necesario en un ordenador y de los programas más comunes como software libre. La mayor parte de los programas que requiere un sistema básico (el propio Richard Stallman elaboró muchos de los instrumentos necesarios para el desarrollo del software, todavía muy utilizados, como el editor de textos Emacs y el compilador GCC C), y un estudiante finlandés llamado Linus Torvalds, desarrollando el núcleo del sistema operativo que faltaba. El sistema operativo era el mismo que los sistemas UNIX y se denominó Linux.

Mucho más que Linux

Fue entonces cuando empezó a expandirse poco a poco el software libre, a través de Linux, intentando romper el monopolio de Windows. Y desde entonces, mucha gente asocia software libre con Linux, y por eso está tan extendida la creencia de que es cosa de cuatro frikis informáticos. Pero el software libre no es sólo Linux. Son muchos otros programas: Los navegadores web Mozilla Firefox y Google Chrome, que abarcan más de la mitad del mercado, la gama de programas de ofimática LibreOffice, el programa de dibujo GIMP, el software de diseño 3D Blender, etc.

Y en muchos ámbitos que no son los ordenadores de los usuarios comunes, predomina el software libre. Por ejemplo, más del 90% de los superordenadores que permiten el progreso de la ciencia funcionan con Linux.

Asimismo, más del 60% de los servidores web tienen como sistema operativo Linux. Y la mayoría del software utilizado en: Servidores web Apache, nginx o lighttpd, base de datos MySQL, lenguajes de programación Python, Perl y PHP, MediaWiki (software utilizado por Wikipedia), Drupal, Joomla!, Software Plone o WordPress CMS (Content Management System) y muchos más. Si no todos ellos estuvieran, seguramente no existiría el Internet que conocemos: los servicios de albergue de webs, blogs, etc. serían mucho más caros por licencias de software, y muchos individuos o pequeñas empresas no podrían contratarlo.

En Smartphones y tablets también es importante la presencia de software libre, tal y como os informamos en el número de octubre de 2010. Si no fuera por el sistema operativo Android desarrollado por Google para estos dispositivos y basado en Linux, debido al coste de desarrollo de su propio sistema operativo y a la dificultad de conseguir un atractivo número de aplicaciones en torno a este sistema operativo, para otros fabricantes sería difícil romper el monopolio de facto obtenido por Apple, y no habría una alternativa adecuada a sus costosos y cerrados productos. Sin embargo, gracias a ello, más de la mitad de los smartphones actuales disponen de un sistema operativo libre, mientras que en las tablets el número de usuarios de Android aumenta paulatinamente. Por último, no podemos olvidar la influencia del software libre en otros ámbitos como la fotografía, la literatura, la música, la enciclopedia y el audiovisual, la creación de la idea de cultura libre...

El software libre ya no es una utopía loca de unos pocos hackers idealistas: no es cosa de unos pocos hackers idealistas, porque muchas empresas muy importantes como Google están promoviendo y financiando el software libre (aunque sean intereses económicos propios: para estas empresas es más barato utilizar herramientas libres, mejorarlas y adaptarlas a sus necesidades que desarrollar desde cero); y no es una utopía loca porque ya ha cambiado nuestro mundo.

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