¿Estamos preparados para combatir los incendios en los túneles?
Uno de los elementos más importantes a tener en cuenta en caso de incendio en un túnel es el sistema de ventilación, que permite la salida de los atrapados dentro del túnel. Para verificar el correcto funcionamiento de este sistema es imprescindible realizar pruebas reales.
En este sentido, el centro tecnológico LABEIN ha presentado el “Ensayo de humo caliente y limpio”, habiendo realizado ya varias pruebas en diferentes túneles del País Vasco.
Prueba de humo caliente limpioEl objetivo de este ensayo es generar un caudal de gases limpios a la misma temperatura que los que se producirían en un incendio real. De esta forma, se podrá analizar el comportamiento de estos humos en el sistema de ventilación de acuerdo a las pautas predefinidas.
Esta prueba se realiza en dos condiciones: rapidez y limpieza. El ensayo no puede durar más de 8 horas. Pasado este plazo, el túnel debe abrirse para no entorpecer excesivamente el tráfico. Esta prueba deberá dejar el túnel completamente limpio. En ningún caso se ensuciarán las instalaciones y la estructura del túnel.
Prueba del corredor del Txorierri
La primera prueba se realizó en el túnel del Txorierri. Para la realización de la prueba se utilizó un equipo generador de humo caliente, analizando su desarrollo, calibración y protocolos de uso. Este aparato emite un gas limpio y sin color a una temperatura suficiente para provocar su estratificación.
En esta prueba el caudal de gas fue de 20 m 3 por segundo, con una duración de 40 minutos. La potencia del incendio fue de 2,2 MW.
El fuego fue controlado gracias a las tres cámaras que grababan la evolución de los humos. En todas las secciones en las que se ubicaban las cámaras se colocó una columna con placas reflectantes. Estas placas se colocaron a tres alturas, lo que permitía ver la presencia y movimiento del humo.
Prueba túnel de LezarriLABEIN realizó el 30 de octubre de 2003 una nueva prueba de medidas de seguridad contra incendios en el túnel de Lezarri de la autopista A1.
Este túnel, de 1.253 metros de longitud, consta de dos tubos gemelos de un solo sentido. Estos tubos están unidos por 5 galerías transversales. Además, el túnel dispone de un sistema de ventilación longitudinal con 10 ventiladores por tubo. En este tipo de sistemas, una vez detectado el incendio, se pretende controlar inmediatamente la dirección del humo, dirigiéndolo hacia el techo y abriéndolo hacia ambos sentidos (derecha e izquierda) para que la gente salga del túnel lo antes posible.
En muchos incendios se produce un peligroso efecto Back-lyering. El humo asciende por los túneles y el sistema de ventilación normalmente emite este humo en un solo sentido, hacia la salida del túnel. Pero en muchos casos el humo va hacia la entrada y baja del techo al suelo, con lo que atrapa a la gente que sale.
Este efecto se denomina efecto Back-lyering. Los investigadores del centro Labein tratan de mantener el humo lo más alto posible controlando la velocidad y dirección del sistema de ventilación, aunque se distribuye en dos direcciones (hasta que el humo tome la forma de un paraguas) para simular de alguna manera este efecto.
Por otro lado, el túnel de Lezarri cuenta con un centro de control en dirección a Bergara. Allí recogen los datos de los sensores del túnel, disponen de una mesa de mando del sistema de ventilación y comunican el túnel con el centro de control mediante megafonía, señalización y paneles de luz.
Resultados de las pruebasA juicio de los técnicos, esta prueba cubre plenamente las necesidades del sistema de seguridad para el control de los gases calientes procedentes de un incendio real. Además, se puede utilizar en túneles con diferentes sistemas de seguridad. Hay que tener en cuenta que estos ensayos no tienen por objeto verificar el comportamiento estructural del túnel.
El protocolo de ensayo es muy flexible ya que permite configurar una solución para cada necesidad: túneles de carreteras o ferrocarriles, túneles unidireccionales o bidireccionales, ventiladores longitudinales o transversales, etc. Además, el hecho de que los túneles apenas se ensucien, reduce considerablemente la contaminación ambiental y reduce drásticamente los costes de limpieza.
A la vista de los resultados obtenidos hasta el momento, es posible que el centro tecnológico LABEIN diseñe y utilice en el futuro sistemas de prueba de nivel de seguridad en áreas diferentes a los túneles.
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