Avión de carga más grande

Uno de los primeros en la Unión Soviética en hacerse cargo del avión de carga fue Oleg Antonov. Diseñador preocupado por las necesidades de aviones especiales para el transporte de cargas hacia 1950. Hasta entonces se utilizaban aviones de pasajeros adaptados.
Gracias a su aerodinámica y a los reactores D18T, el avión An-124 puede transportar hasta 4.500 kilómetros una carga de 150 toneladas a 850 km/h.

Sin embargo, los aviones de carga son muy diferentes de diseño. Suelen tener una bodega grande, un pavimento firme, dispositivos especiales para amarrar la carga en su interior, puertas grandes de entrada y salida fácil de cargas (tamaño mínimo de bodega), etc. La bodega cuenta además con grúas y cabrestantes para la entrada y salida de cargas grandes y pesadas, así como rampas para la carga y descarga de vehículos. Por otro lado, los aviones de carga deben aterrizar en aeropuertos no acondicionados, ya que transportan piezas grandes, vehículos, fragmentos de edifcio, etc. a obras alejadas. Por ello, el avión de carga debe ser capaz de aterrizar en aeropuertos cortos rodeados de montañas y en climas fríos. Por todo ello, este tipo de avión tiene fuselaje de gran diámetro y alas superiores para que el pavimento para la carga esté más abajo. Además, teniendo en cuenta su peso, tiene numerosas ruedas de aterrizaje.

En la Unión Soviética Oleg Antonov diseñó este tipo de aviones, denominados An-8, An-, An-22, An-26 y An-32. Por ejemplo, el modelo An-22 batió todos los récords en 1967. Entonces subió la carga de 100,4 toneladas hasta los 8.000 metros de altura y nadie se adelantó en otros diecisiete años.

Sin embargo, en la Unión Soviética se han desarrollado modelos más grandes y mejores, siendo el último An-124 Ruslan. Sus principales características son: Con una capacidad total de emisión de 405 toneladas (105 toneladas de carga), 6,4 metros de ancho, 4,4 metros de alto y 36 metros de largo (más de 1000 metros cúbicos), la bodega tiene una autonomía de 16.500 kilómetros y puede alcanzar una velocidad de 850 km/h a 11.000 metros de altura.

Tiene 24 ruedas de aterrizaje, pero su altura puede regularse. Esto hace que al abrir las puertas la distancia entre la bodega y el suelo sea muy pequeña, facilitando así la entrada o salida de las cargas.

Estas veinticuatro ruedas permiten, por otra parte, aterrizar o despegar en pistas sin hormigón de 3.000 metros. Al despegar, cuatro reactores del modelo D18T ejercen una fuerza de 23.400 kg.

Otro aspecto especialmente cuidado en este avión de carga ha sido el de la seguridad. Para ello se han realizado numerosas pruebas en laboratorios y pistas y se ha simplificado mucho el trabajo de los controladores de tripulación y tierra a través de los ordenadores. Además de los ordenadores para el gobierno del avión, cuenta con unos cuádruples mandos electromecánicos e hidráulicos en beneficio de la seguridad. También presenta una gran estabilidad "artificial". La estabilidad artificial se consigue mediante la rotación automática de las aletas para compensar los efectos adversos en el aire por turbulencias.

Bodega del avión An-124. 6,4 metros de alto, 4,4 metros de ancho y 36,5 metros de largo. Tiene dos grúas longitudinales de 10 toneladas para carga y descarga en el techo.

En junio de 1985, los soviéticos presentaron el avión de carga An-124 en la Exposición Internacional de París junto con los de otros avionistas, pero fue el más aplaudido y el que los expertos pusieron en primera línea en las revistas.

El avión An-124 se utiliza para el transporte de cargas hasta cualquier rincón de los amplios territorios de la Unión Soviética, pero antes de comenzar a operar en julio de 1985 V. El piloto Terskoi batió veinte marcas mundiales en un solo vuelo de prueba. 171 Tm y 219 Kg. de alces hasta una altura de 10.750 metros. El avión pesaba un total de 380 toneladas.

Comenzó a trabajar con normalidad en 1986 y llevó camiones gigantes a una mina de diamantes de Yakutia.

De Vladisvostok a Udatxni transportó 182 toneladas en un viaje de 25.000 kilómetros. Desde entonces, este hércules continúa trabajando en su transporte aéreo de un lado a otro de la Unión Soviética.

Babesleak
Eusko Jaurlaritzako Industria, Merkataritza eta Turismo Saila