Otras células del cerebro han conseguido convertirlas en neuronas funcionales en ratones y células humanas aisladas mediante una nueva técnica de un solo paso. Con esta técnica se ha conseguido restaurar los síntomas de la enfermedad en los modelos de ratón de Parkinson, y los investigadores creen que podría ser una nueva vía para tratar enfermedades neurodegenerativas. El estudio ha sido publicado en la revista Nature.
Uno de los principales objetivos de la medicina regenerativa es sustituir las neuronas que se pierden en los trastornos neurodegenerativos y conseguir que las nuevas neuronas se integren en los circuitos neuronales. En el caso del parkinson, por ejemplo, en algunas zonas del cerebro se pierden neuronas dopaminérgicas. Pues bien, en esta nueva investigación han demostrado que algunas células abundantes en el cerebro, los astrocitos, pueden convertirse en neuronas dopaminérgicas.
Los astrocitos producen una proteína llamada PTB que hace que el astrocito no se convierta en neurona. Así, en los modelos de ratón del parkinson, al excluir a los astrocitos de la zona afectada por la enfermedad la proteína PTB, se ha observado que las neuronas se vuelven totalmente funcionales, repoblando los circuitos neuronales reducidos y, por tanto, regenerando el nivel de dopamina y las funciones motoras. Además, han encontrado un método eficaz de eliminación temporal de la proteína PTB: el empleo de oligonucleótidos que bloquean el ARN mensajero que contiene la información para la producción de la proteína.
Sin embargo, los investigadores han advertido de la necesidad de investigar más para utilizar esta técnica en humanos. Por ejemplo, alrededor del 65% de los astrocitos a los que se ha aplicado la técnica no se han convertido en neuronas, algo que habría que mejorar. Por otro lado, se deberá analizar si la eliminación de proteínas PTB o las técnicas empleadas para ello presentan daños laterales.