El parto, la clave para entender el autismo
Según un estudio publicado en la revista Science Advances, el momento del parto puede ser clave para el desarrollo del autismo. De momento, se han ensayado en animales, pero los resultados han demostrado que la no disminución de la actividad cerebral durante el parto puede tener consecuencias en el desarrollo neurológico posterior del cerebro.
El nacimiento es un momento crítico para los mamíferos. Es tan crítica que el cerebro del niño debe prepararse expresamente para el parto. La oxitocina reduce la actividad de las neuronas, con lo que el cerebro del niño permanece menos activo en ese momento de estrés. De alguna manera es una forma de proteger el cerebro. “lo prepara para ese momento traumático, para que sufra menos. Y es que, cuando no está tan activo, el cerebro es menos sensible”, explica Paolo Bonifazi, uno de los investigadores y autores del estudio.
La oxitocina es una hormona clave en todo esto: pone en marcha el parto, fortalece el vínculo emocional entre la madre y el niño y ayuda a evitar los efectos adversos del estrés durante el parto. “La oxitocina que produce su madre envía la señal a las neuronas del bebé para que, antes del parto, abran una señal inhibitoria entre ellas”, explica Bonifazi. En algunos casos, la oxitocina no emite esta señal inhibidora para el cerebro. No proteger el cerebro en ese momento puede causar daños. Dicen que ahí está la clave para entender el autismo, según Bonifazi. “De alguna manera, las neuronas se quedan como si estuvieran permanentemente excitadas, como si fueran inmaduras, y pueden provocar problemas neurológicos en el futuro”.
De momento, estos resultados se han visto en los experimentos realizados con ratas, dirigidos por el neurobiólogo Yehezkel Ben-Ari, en Marsella. El laboratorio ha comparado los partos de dos grupos: ratas normales y ratas en las que se ha inyectado ácido balproico en el útero. De hecho, el ácido balproico provoca autismo si se toma durante el embarazo. Bonifazi ha estudiado la morfología de las neuronas antes y después del parto y ha observado que en las ratas neonatales normales el cerebro no crece en los dos días próximos al parto, mientras que en las ratas recién nacidas autistas el cerebro ha seguido creciendo y las neuronas del hipocampo continúan extendiéndose.
Los estudios epidemiológicos han sugerido previamente que el autismo puede estar relacionado con alteraciones relacionadas con el nacimiento, como cesáreas, partos prematuros y problemas en el momento del parto. Este estudio confirma que el nacimiento es un momento crítico y que puede tener que ver con la patogenia de las enfermedades cerebrales.
En la segunda fase de la investigación se ha buscado también probar la eficacia de un medicamento que ha dado bumetamida a las ratas autizadas antes del parto, ya que este medicamento también produce señales inhibidoras, al igual que la oxitocina. Tras la administración, los investigadores han descubierto que antes del parto se frena el desarrollo cerebral. “Al igual que en los animales, creemos que aporta beneficios a los niños autistas. La medicina cambia el modo de funcionamiento de la neurona y el cerebro funciona mejor. Ahora se están desarrollando ensayos clínicos porque creemos que puede contribuir al desarrollo de estas neuronas que han quedado permanentemente excitadas”, explica Bonifazi. “No cura la enfermedad, pero puede reducir los síntomas para una mejor integración social”.
Según los investigadores, el nacimiento es el mecanismo biológico más complejo que se da en los mamíferos y es fundamental investigar más. Se producen grandes cambios hormonales, fisiológicos, inmunológicos, microbiotales y vasculares, pero es sorprendente conocer poco de ellos a la vista de sus consecuencias.
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