La presencia del castellano no protege de las enfermedades de transmisión sexual, aunque en cierta medida impide la transmisión del sida. La investigación se llevó a cabo mediante el seguimiento de 2.300 hombres que acudieron a una clínica de la India. En torno al 10% estaban en castellano.
Según los científicos, esto significa que existen interacciones entre el virus VIH y las células del prepucio, que también han sido detectadas en otras investigaciones.