“Conociendo las estrategias de los seres vivos y haciendo un uso adecuado, creo que ganaríamos mucho”
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Como muchos, me ha sorprendido el desarrollo de nuevas tecnologías. En las dos áreas en las que trabajo, tanto en investigación como en docencia, ha supuesto un cambio radical. Y eso me produce sentimientos contradictorios: por un lado, creo que nos abre grandes posibilidades, pero por otro, me preocupa también a dónde vamos y a dónde vamos a llegar.
Por su parte, me agita ver que la competitividad prevalece sobre los principios éticos, sobre todo en la investigación, lo que desgraciadamente supone una confrontación más que a la cooperación. En la enseñanza, por otra parte, me perturba la actitud del profesorado que desprecia el interés de los alumnos.
Por último, me fascina la naturaleza en general, especialmente los ecosistemas de la alta montaña: su biodiversidad y sus estrategias de vida vegetal y animal…
Me ha costado bastante hacer la respuesta, pero creo que lo que realmente me gustaría es cambiar los hábitos de consumo y los modelos. Por ejemplo, estoy muy preocupado por los sistemas de producción intensivos de alimentos, por los orígenes de los alimentos, y me gustaría apostar por la soberanía alimentaria, por fórmulas que alcanzaran sistemas productivos sostenibles ligados al territorio.
Para ello es imprescindible conocer y comprender la red trófica de los ecosistemas. Clarificar los mecanismos que se dan en estos ecosistemas para el reciclaje de los alimentos y la diversificación y riqueza de la producción, poniendo el acento en el lugar (el territorio) y utilizando las estrategias que la propia naturaleza nos aporta. Por ejemplo, entre los seres vivos hay muchos ejemplos de simbiosis. Conociendo estas estrategias y haciendo un uso adecuado, creo que ganaríamos mucho. Además, con esta producción todo se vincula: cultura, tierra, paisaje, personas…
Zu idazle
Zientzia aldizkaria
