La empresa CAF y la Fundación Elhuyar invitan cada año a cualquier persona interesada en la escritura y en los temas científicos a escribir artículos de divulgación o libros en euskera y a participar en este certamen. Este año la medicina ha sido la principal medicina entre los artículos presentados y los proyectos de libros. De hecho, la mitad de los trabajos se han centrado en este tema. Pero otros muchos temas han sido tratados en el resto de trabajos. Según el jurado, "en la mayoría de los trabajos se ha visto un buen o muy bueno".
El ganador de los artículos de divulgación ha sido el debarra Aitor Urbieta Artetxe, con la obra "Los electrodomésticos prefieren tocar jazz a tocar la sinfonía". El autor nos introduce en el mundo de los entornos inteligentes, explicando las ventajas de una casa inteligente en la vida cotidiana. Y es que, coordinados entre sí y comunicados unos con otros, cumplirían de forma automática nuestros deseos y necesidades cotidianas, no necesitarían directores y, como perseguidores, improvisarían según la situación para dar una respuesta satisfactoria. Según el jurado, "en este artículo circular, el autor nos muestra que estamos a las puertas de este sueño, de una manera sencilla y a la vez con toda profundidad".
La melodía de jazz no estaría mal para musicar el paisaje oculto que nos muestra el segundo premiado. El físico Jon Azkarraga Aretxabala gana el segundo premio con la obra "La cara oculta de la luna". En este artículo descubriremos las características y peculiaridades de la relación entre la Luna y la Tierra, y veremos, entre otras cosas, por qué una de sus caras está siempre oculta. El autor habla también del origen de la luna, todavía oculta para los científicos. El jurado destacó que "las leyes físicas entre la Luna y la Tierra son fáciles de expresar" y que "combina bien los conocimientos científicos con el deseo de sueño que la hermosa madre despierta a los seres humanos".
Y no a la luna, el tercer premio ha bajado por el río, a manos de la bióloga Lide Aristegi Urkia. En el artículo titulado "Madera muerta, río vivo", Aristegi nos habla de la importancia ecológica de la madera muerta de los ríos. El jurado explicó que "alrededor de la madera muerta florece la vida". El jurado destacó que este trabajo es de fácil lectura: "Siguiendo con la exclamación, lo leeremos en una rampa, con una escritura precisa y adecuada".
Por último, el donostiarra Xabier Artaetxebarria Artieda ganó el premio especial para jóvenes menores de 25 años "Diagnóstico por ordenador: ordenadores médicos?". con el trabajo. Según el jurado, "en este artículo, el escritor nos lleva, de una manera muy adecuada, a un futuro cercano y emocionante".
El premio al libro divulgativo ha sido para el pamplonés Javier Navarro Los Arcos con el proyecto de Física y Metafísica. Navarro quiere tejer las preguntas y respuestas que han ido construyendo los científicos a lo largo de la historia, mostrando el valor de las acciones personales y teniendo en cuenta las limitaciones psicológicas, sociales e históricas; y mostrar el hilo continuo de la metafísica desde Babilonia hasta Einstein, desde Aristóteles hasta los electrones y desde la idea del vacío hasta el infinito.
Lo que no ha quedado en blanco ha sido el proyecto de tejer la red de Vida de Begoña Arrate Larrañaga, ganadora de la beca de hace dos años. Ya ha visto la luz, convertida en un libro del mismo título, presentado en el acto por el propio Arrate. En opinión del escritor, y atendiendo a los postulados de algunos científicos, el XXI. el siglo XX será el siglo de las redes y el estudio de la naturaleza a través de la ciencia de las redes permitirá al ser humano dar pasos significativos. Por tanto, los objetivos del libro son explicar en qué consisten los debates filosófico-científicos sobre esta idea y ayudar a los lectores a imaginar cómo es la red de la vida.