Día de los hermanos Wright

El 17 de diciembre de 1903, los hermanos Wilbur y Orville Wright pusieron en marcha la historia de la aviación motorizada en la playa norteamericana de Kitty Hawk. Realizaron un vuelo de 36 metros con un aparato más pesado que el aire. Fantasías sobre las máquinas voladoras
17 de diciembre de 1903: Primer vuelo de los hermanos Wright.

Wilbur y Orville eran hijos pastores. Siempre estuvieron muy unidos, aunque fueran muy diferentes: el mayor era silencioso y solitario, y la tranquilidad, la reflexión, la voluntad eran los ejes de su personalidad; el pequeño era más abierto; no era tan genial e intuitivo como su hermano, pero era mucho más amigable que él.

Su afición por la aeronáutica comenzó en 1878. Su padre les regaló un pequeño helicóptero de papel movido por un motor de goma. Sin embargo, la inventiva vino más tarde.

La emoción de los planeadores

Hermanos Wright. Wilbur (izquierda) y Orville.

Primero se dedicaron al periodismo: Crearon los periódicos The Midget y The Evening Item. A continuación se instaló una tienda de bicicletas, en cuyo taller comenzaron a inventarse las primeras máquinas voladoras. En 1896, el pionero alemán Otto Lillienthal muere tras sufrir un accidente con un planeador construido por él, y al enterarse de ello, deciden aprovechar sus métodos para construir el primer aparato a motor sobre bases sólidas.

Octave Chanute se puso en contacto con el ingeniero de origen francés, tras leer Progress in Flying Machines, su libro sobre aviación de 1894. Chanut tenía buena relación con el francés Louis Mouillard, otro pionero y el capitán Ferber. A este último se calienta rápidamente cuando conoce las obras de los hermanos Wright y las da a conocer en Francia.

Todavía no está claro que el giro de las alas lo inventaron los hermanos Wright por sí mismos o se basaron en el libro de Mouillard L’Empire de l’air, un sistema que se describe perfectamente en él.

Maqueta del Flyer en la exposición del Museo de la Ciencia de San Sebastián. Esta maqueta, por tamaño, es la misma que la original.

Basándose en las ideas de Chanute, construyeron un pequeño cometa biplano de 1.50 metros, con las puntas de las alas unidas por cuatro cables que accionaban el cometa desde el suelo. Un banquero de Dayton, llamado Huffmann, les alquiló un terreno para ensayar, pero no era muy apropiado para ello, y empezaron a buscar otro. Fue descubierto en la Carolina del Norte: Lugar llamado Kitty Hawk. Un tate les dijo que el lugar estaba lleno de dunas de arena y que el viento soplaba constantemente.

Primeras sesiones

Y es que en 1900 montaron el primer planeador en la puerta de la casa de Tate. Se trata de un biplano de 5 metros de longitud sur y 15 metros de superficie sur. En la fachada se colocaba un lema de profundidad. El piloto tenía que ir tumbado sobre él y sólo podía controlarlo cuando el viento lo permitiera. Sin embargo, se utilizó sobre todo como cometa, es decir, utilizando unas cuerdas que se maniobraban desde la tierra.

No todas las sesiones fueron exitosas.

En septiembre de 1900 escribe a su padre: “No se puede decir que el aparato vuele. Sólo lo utilizo para solucionar problemas de equilibrio en el vuelo. Si no, mis proyectos están muy avanzados en comparación con mis métodos anteriores. En primer lugar se trata de controlar completamente el aparato, de alguna manera, ya que una vez conseguido se solucionará inmediatamente el problema del motor".

En 1901, los hermanos Wright empezaron a probar con un mayor y mejor planeador. En vuelo libre era capaz de mantener el piloto si el viento era de media velocidad. Estos ensayos se realizaron a 7 kilómetros al sur de Kitty Hawk. Chanute, un hombre de setenta años, estuvo allí animando.

El avión Flyer fue construido aprovechando los recursos de la fábrica de bicicletas.

La máquina no era estable, pero le ofreció unas experiencias muy bonitas. Además, les permitió analizar todas las teorías que hasta entonces se conocían. Es cierto que a veces estas experiencias fueron desesperadas, pero a través de ellas llegaron a construir un auténtico túnel de viento en Dayton. Era cuadrada: 35 centímetros de ancho por 2 metros de largo. En este túnel se analizó el comportamiento de varios perfiles sur, soplando con un ventilador.

En septiembre de 1902 fue probado con un tercer planeador, con alas más largas y deriva atrás. En dos meses superó los mil planeos y consiguió subir hasta los doscientos metros.

Seguían sin resolver el problema del equilibrio unilateral, ya que el Sur inclinado tendía a generar resistencia. Para corregir este error, combinaron el lema de dirección con el sistema de giro sur, lo que permitía manipular los dos dispositivos simultáneamente. Fue una solución muy eficaz. Por lo tanto, una vez obtenido el control aerodinámico del planeador, estaban en condiciones de pasar a la siguiente etapa: el aeroplano motorizado.

Acudieron a fabricantes de automóviles para conseguir el motor, pero no encontraron motores. Por eso ellos mismos fabricaron Charles Taylor ayudado por el mecánico. Construcción de un motor de 4 cilindros por línea: Tenía una fuerza de 12 a 16 CV y con unas cadenas movía las hélices contra unos rotativos de madera, también fabricados por ellos mismos.

Año de éxito

En la primera fotografía aparecen Wilbur (arriba) y Orville haciendo pruebas con un planeador. En el otro, los dos hermanos reparan en el avión.

A finales de 1903, los hermanos Wright estaban dispuestos a volver a probar con el nuevo aeroplano. Se llamó Flyer y las pruebas se realizaron en el Kill Devil Hill, cercano a Kitty Hawk. Era un aparato similar al del planeamiento de 1902, pero de 12,34 metros de longitud sur, 45 metros de superficie sur y 6,82 metros de longitud. El piloto tenía que ir tumbado sobre el ala como en los planeadores.

El primer intento se realizó el 14 de diciembre. El aparato disponía de patines para facilitar su aterrizaje y se deslizaba contra el viento por un carril de madera situado en la ladera de una duna. Se hicieron palillos para decidir quién estrenó los aparatos, y Wilburri le tocó. El aparato consiguió despegar, pero enseguida se equivocó y cayó al suelo. La pérdida de velocidad fue la causa.

Sorprendente. El avión Flyer alcanzó los diez metros de altura en sus primeros vuelos.

El 17 de diciembre fue elegida una llanura. Era frío y mucho viento. Era el turno de Orville. Así describió su intento de hacerse famoso en todo el mundo: «Cuando nos levantamos, el viento soplaba por el norte de unos 35 km/h. Durante unos minutos se hizo girar el motor y las hélices para que se calentaran. Luego me puse en el aparato para hacer el primer intento: Eran las 10:35 y el viento todavía era frío. Al soltar el cable que sujetaba el aparato comenzó a moverse cada vez más rápido: 12 o 13 km/h o Al llegar al cuarto tramo del rail, se despegó. Deambuló. La fuerza del viento y la falta de experiencia del piloto provocaban un aumento y un descenso. Cuando el avión se encontraba a 35 metros del final del rail, se derrumbó. El vuelo duró 12 segundos. Por primera vez en la historia, muchas máquinas se levantaron por sí mismas con una persona en la zona. Navegó sin reducir la velocidad, tomando aire en el punto de altura».

Wilbur y Orville realizaron dos vuelos, uno cada uno: Duraron entre 12 y 15 segundos. Después Wilbur despegó por última vez: El vuelo fue de 59 segundos y recorrió 260 metros. Al final, el aparato cayó y se deterioró. El ensayo fue visto por 5 testigos, por lo que se considera el primer vuelo de la historia.

El ondarrutarra Juan Arantzamendi nos ha enviado este documento. Es la columna que publicó el periódico ABC el 4 de octubre de 1903, escrito por el periodista Alfredo Marquerie. Para entonces, los hermanos Wright realizaron sus primeras sesiones, pero aún no consiguieron el primer vuelo. Debido al encanto e interés histórico del documento, se ha publicado como tal. Eskerrik asko Juan por enviar este interesante texto.

ABC Domingo 4 de octubre de 1903. Página Documentación

FANTASIAS SOBRE LAS MAQUINAS VOLADORAS

Irakurle Pariseko informazioa eta albistegiarekin lotura duen Prentsan ematen dugu, Hermanos Wright eta bere tresna gisa berriro ere. Hori dela eta, hori dela eta, Pirenaikoa esan duten gacetas eta prensas gausak beste alde batera. Algunos colegiales franceses creer á –al menos ellos lo aseguran– que en el Hipódromo de Hunaudiére se reunieron hace unas mañanas personalidades distinguidas, entre ellas el Bleriot jauna, técnico en esta materia, hasta que se haya convertido en algo menor, o por haber navegado por la ciencia (?). Wilbur Wright –bat, Montgolfier edo Lumière bezala, inaldunak honetan ere, gure gazteak eta ilustreak egileak Hermanos Alvarez Quintero –parece ser– errepitatzen jarraitu behar ditugu beste txostena ez gutxi ni asko ere, gure gazteak eta ilustrazioak ere ilustratzen zituen Hermanos Alvarez Quintero Hermanos Alvarez Quintero ak-eta espaldunak izan zen. (?) Albistegietan gehitu –eta hemen peliagudo gehiago etorri da kasu–, arte raro con pretensiones voladoras alcanzó nada menos que diez metros de altura (? ), permaneció sin caer á tierra durante un minuto y cuarenta y cinco segundos!, hasta que se aseguró que había realizado una evolución(?) -

Hasta aquí nuestros informes de traducción de los órganos de información (?) del vecino país. Ni zer esan behar du, zergatik enengainatzeko?, ez ematen ni gutxi ez crédito. Eutrapélicamente jasoko ditugu, eta konstatu ere ez den gaur Egun de Inocentes, jakina baita gaia oso ematen dela egunkaria abenduaren 28a. Hala ere, bere irakurleak embromatzeko. Por esa razón hemos titulado esta crónica rápida y escrita á vuela pluma "Fantasías sobre las máquinas voladoras". Dudarik gabe, fantasiaren lagundu por la fértil efilaren imaginación avisatu bat da. ¡Aviados estaríamos si de veras existía la aviación ó como della! Gauza bat da globoa –beste batzuk ere jarri ahal izatea, Julen Vernea- invenciones berientas de Julio Vernea-, eta beste oso batzuk artefaktatu batizados con el chocante nombre de aeroplines o aeroplanos. ¡Vamos a, periodistas unos pocos formalistas!

ALFREDO MARQUERIE

Babesleak
Eusko Jaurlaritzako Industria, Merkataritza eta Turismo Saila