Muchas veces cuando hablamos de nuestros trenes y hablamos de sus fallos, retrasos e inconformidades, decimos que nuestro País es una prueba más de lo que no es Europa. Y así parece al menos en el caso del ferrocarril. En el momento en que se está impulsando el ferrocarril en Europa y se están planteando planes ambiciosos y eficaces para el futuro, nuestros dirigentes se lanzan a cerrar los trenes con el espíritu mágico de la rentabilidad entre nosotros. Eso no parece buen camino... léalo.
En la mayoría de los países europeos se está implantando una nueva o renovada red ferroviaria (ver mapa). Además, esta red ferroviaria está estrechamente ligada a los nuevos túneles y carreteras. Por ello, y gracias a los futuros túneles y puentes que se construirán, se podrá ir desde Dunedin hasta Ankara sin descender del tren. El pasajero que subirá al tren escocés de Dunedin viajará desde el Inter City de Gran Bretaña hasta Dover.
Allí, sin abandonar el tren, partirá por la boca del túnel que discurre bajo el Canal de la Mancha. Una vez en Francia, la red ferroviaria de la Europa continental llegará hasta Istambul y llegará hasta Ankara a través de un túnel que unirá Europa y Asia, cruzando el Bosforo. Todo el viaje será rápido, cómodo y seguro.
Vamos a analizar uno a uno los pasos que se quieren dar para conseguirlo.
En Gran Bretaña ya existe una conexión ferroviaria de velocidad rápida entre Dunedin y la costa sur. El túnel que discurre bajo el Canal de la Mancha, que será un túnel ferroviario, ha comenzado a construirse y podría estar finalizado para 1993. En Gran Bretaña la intención es acelerar la velocidad de los trenes de 200 a 225 km/h.
Es el conocido Train à Grande Vitesse (TGV) de Francia. La primera línea de este tren se abrió en 1983 entre París y Lyon. Las inversiones fueron importantes, más en concreto, pero el éxito de TGV (16 millones de pasajeros por año) justifica plenamente esta inversión. Actualmente se está realizando una nueva línea de TGV. Esta tiene forma de Y y mientras una rama va a Nantes, la otra llegará hasta Burdeos. Esta última llegará por fin a Euskal Herria, ya que su último destino es Hendaia. Gracias a este nuevo TGV, el viaje entre París y Burdeos se reducirá de cuatro a tres horas. Otra línea de TGV, que servirá de ramal a la línea Paris-Brussela-Colonia, enlazará el túnel de la Mancha.
En la República Federal de Alemania se están construyendo dos nuevas líneas rápidas. Estas líneas conectarán las ciudades de Mannald y Stuttgart con las de Hannover y Würzburg. Los trenes de Alemania Occidental circularán a 400 km/h. Las nuevas vías de tren finalizarán para 1991 y en principio sólo circularán a 250 km/h.
También se está trabajando en Italia. El Destettisima entre Roma y Firenze se está construyendo en estos momentos. El gobierno italiano aprobó en 1969 la construcción de esta línea, pero por otro lado, hasta 1986 no se ha ampliado el primer tramo y se extenderá totalmente en 1989. Mientras tanto, los primeros pasos para la construcción del puente que unirá Sicilia y el continente cruzando el estrecho de Messina comienzan este año. La construcción de este puente será tan costosa como la construcción del túnel del Canal. El motivo es que Sicilia sea sensible al terremoto. Por eso el puente debe ser capaz de soportar terremotos.
La revisión que estamos dando al proyecto de las nuevas vías ferroviarias europeas se cierra con el desdoblamiento y mejora de la línea férrea de 1300 km que atraviesa Yugoslavia de norte a sur. El objetivo de este ferrocarril es conectar en tren con Grecia al resto de países de la Unión Económica Europea.
Como se puede observar, existen numerosas intenciones y proyectos para la ampliación y mejora del servicio de los ferrocarriles por toda Europa, apostando en el futuro por la recuperación de gran parte del transporte de mercancías y pasajeros. El lema es rápido, cómodo y seguro.