En las selvas pluviales de Nueva Caledonia se ha encontrado una especie que puede ser la clave para comprender la evolución de las plantas con flores. La planta, denominada amborela, ha sido estudiada por investigadores de la Universidad de Colorado, que cree haber pasado 130 millones de años sin apenas sufrir modificaciones. Así, el amborel es un fósil vivo que se asemeja a las plantas del Cretácico y del Jurásico.
Los antepasados de las plantas florales actuales --angiosperimas- no se conocen, pero los investigadores creen que podían ser similares a la amborela. De hecho, la amborela guarda junto con el huevo una célula estéril que ayuda al huevo en el aparato reproductor de la hembra. Según los investigadores, esta célula estéril es un testimonio de los rápidos cambios que sufrieron las plantas en el Cretácico y en el Jurásico, y ayudará a desentrañar cómo surgieron las angiospermas.