Por encargo de la Comisión Europea, los bosques de treinta países europeos han investigado más de 600.000 árboles y han sacado conclusiones preocupantes. Más de un cuarto presenta una pérdida de hojas superior al 25% y un 10% una decoloración foliar superior al 10%.
El calor, la contaminación del aire, los parásitos, etc. han dañado todo tipo de árboles, desde los robles mediterráneos hasta los resinosos árboles de Polonia. La única buena noticia es que el contenido de azufre en el suelo y en las hojas ha disminuido.