Imagen de la ciencia y la tecnología en el espejo de los jóvenes
Este estudio se ha realizado por primera vez en el País Vasco y, junto con la Fundación Elhuyar, los autores son el Departamento de Educación del Gobierno Vasco y la Cátedra de Cultura Científica EHU-BFA. Han querido conocer la situación de todo el territorio, acudiendo a casi un centenar de centros educativos de la Comunidad Autónoma Vasca, Navarra e Iparralde a realizar el cuestionario, según ha explicado Muguruza, “porque las escuelas son el camino más fácil para llegar a los alumnos”. En total han participado 2.061 alumnos de entre 10 y 18 años.
Para explicar las razones que han llevado a la realización del estudio, Muguruza ha señalado la misión de Elhuyar: “Uno de nuestros principales objetivos es la socialización de la ciencia y la tecnología desde la infancia. Entonces, para nosotros es necesario saber cómo la sociedad vive o ve ese mundo”.
Muguruza también ha dado más razones: “Por otro lado, la ciencia y la tecnología están muy presentes y cada vez más presentes en nuestro día a día. Por tanto, es muy importante que la sociedad, y especialmente los jóvenes, desarrolle una cultura científica. Además, en Euskal Herria y en Europa existe una preocupación por las vocaciones, ya que existen dificultades para conseguir investigadores necesarios para el desarrollo económico europeo”. Adelantó que tienen previsto realizar el estudio cada cuatro años para comprobar si hay cambios con el tiempo.
Del ocio al colegio
A pesar de los resultados del estudio, Muguruza ha destacado el gran interés mostrado por los niños y jóvenes por la ciencia y la tecnología: “Casi la mitad responde que tiene mucho o muy alto interés. En concreto, la medicina y la salud, la ciencia y la tecnología, el medio ambiente y la ecología se encuentran en el tercer, cuarto y quinto lugar de 11 temas escogidos. Y antes sólo hay dos temas, el primero es deporte y el segundo, cine, arte y cultura. Además, el deporte ha vuelto a aparecer en primer lugar cuando se les ha preguntado sobre las vocaciones, sobre todo entre los más jóvenes”.
Por otro lado, dentro de los temas de ciencia y tecnología, los jóvenes han apostado por la informática, ya que casi dos de cada tres tienen mucho o mucho interés en este campo. Detrás de la informática están la tecnología, el medio ambiente y la salud, y los que menos les interesan son el espacio y las ciencias de la tierra.
Sin embargo, el interés no significa que busquen información sobre estos temas. De hecho, el estudio ha puesto de manifiesto que sólo una minoría de jóvenes recurre a los medios de comunicación en busca de contenidos sobre ciencia y tecnología, aproximadamente una de cada diez.“La principal fuente de información juvenil es Internet y los medios de comunicación en general son más utilizados que para información de ocio”, ha precisado Muguruza.
Pasando a las preguntas sobre educación, Muguruza dice que están “satisfechos” con la educación que reciben en los centros en temas de ciencia y tecnología. De hecho, los resultados del estudio muestran que la mitad (49,7%) considera que la formación que se imparte en este ámbito en el centro es muy buena o buena. “Creen que son asignaturas difíciles, pero a dos de cada tres no les parece que sean una chapa y dicen que sus actividades en relación a estos temas son divertidas”.
A la hora de elegir las asignaturas favoritas, Muguruza considera “destacable” la elección de Matemáticas por parte de un gran número de alumnos. De hecho, Matemáticas aparece en segundo lugar en la lista de asignaturas favoritas, y en la parte superior de la lista aparecen también Ciencias Ambientales (cuarto) y Física y Química (sexto). La Educación Física es la cabeza de lista de niños y jóvenes.
Además, los autores del estudio han querido saber si estas materias parecen útiles para los jóvenes. Y la respuesta es que sí, el 85,3% no está de acuerdo con la siguiente frase:No me gusta estudiar ciencia y tecnología porque no sirven para nada. Ocho de cada diez cree que aprender ciencia y tecnología merece la pena para futuros estudios, y siete de cada diez, para el trabajo que deseen.
En la parte de preguntas sobre educación, preguntados por la metodología de enseñanza-aprendizaje, el alumnado prefiere asignaturas apoyadas con nuevas tecnologías (67,7%).
Imagen sobre ciencia y tecnología
Otro de los objetivos del estudio era conocer su imagen sobre ciencia y tecnología y científicos. Así, a la vista de las respuestas a las preguntas, se puede concluir que tienen una imagen positiva, “porque lo vinculan con el bienestar de la sociedad”, según Muguruza. De hecho, siete de cada diez estudiantes piensa que la ciencia y la tecnología hacen nuestra vida más cómoda y fácil, ayudan a curar enfermedades o la ciencia nos ayuda a conocer mejor el mundo.
Sin embargo, Muguruza ha subrayado que los niños y jóvenes son conscientes de que el uso de la ciencia y la tecnología no es sin riesgos: “Por ejemplo, dicen que creen que pueden suponer un riesgo para la salud”.
En cualquier caso, el informe de resultados destaca la imagen positiva de la ciencia y la tecnología frente al negativo: uno de cada tres de los entrevistados considera que los beneficios de la ciencia y la tecnología están por encima de los perjuicios y sólo el 6,7% considera que los daños son mayores. Eso sí, alrededor del 30% no tiene una opinión clara.
Muguruza nos explica cómo los jóvenes representan a los científicos: “Son hombres, los mayores, llevan bata blanca y trabajan en el laboratorio. Sin embargo, me parece importante que los jóvenes no sean un estereotipo de científico loco, ya que aunque la imagen del científico es de un hombre viejo peludo, también han dicho que es gente corriente y, por encima de esas otras características, han dicho que son creativos y felices y que trabajan en equipo y no de forma individual”.
¿Qué quieres ser de mayor?
También han preguntado a los niños y jóvenes qué profesión quieren tener en el futuro. Y, según los resultados, la mayoría de los jóvenes no tienen intención de ser científicos: once profesiones optativas, su labor investigadora ocupa el octavo lugar. Las profesiones preferidas son la del deportista y la del empresario. “Es decir, los jóvenes piensan como los adultos”, ha afirmado Muguruza. “Ellos, tanto en Euskal Herria como en Europa, reconocen la importancia de los investigadores, pero luego no se ven en esa profesión”.
En cualquier caso, para Muguruza es destacable la buena imagen que tienen los jóvenes de la ciencia y la tecnología en general: les parecen interesantes, les resultan útiles, aportan más beneficios que perjuicios, los científicos son gente corriente... “No sabemos qué pensaban los jóvenes de antes, ya que por primera vez en Euskal Herria hemos realizado un estudio de este tipo, pero creemos que la tendencia está cambiando, porque hemos oído muchas veces que estos temas son de chapa y en este estudio han dicho lo contrario”.
En opinión de Muguruza, en este cambio de tendencia, probablemente han influido las iniciativas que se realizan para acercar la ciencia y la tecnología a los jóvenes. “Por ejemplo, en los centros escolares cada vez se da más importancia a los experimentos y a los trabajos en grupo, y también hay más actividades fuera de los centros sobre estos temas, como festivales científicos, colonias de ciencia... Yo creo que ahora estamos viendo los frutos de esos esfuerzos”.
Reflejo social
Begoña Ochoa es directora de Política Científica del Departamento de Educación y para ella es especialmente interesante ver si hay cambios en la percepción de los jóvenes. “Para ello tendremos que realizar estos estudios con una periodicidad determinada. Pero ahora, al menos, tenemos una base y a partir de ahora vamos a disponer de una herramienta para medir el impacto de las acciones que realizamos”, ha señalado Ochoa. “Sin embargo, tenemos que tener en cuenta que los cambios en la sociedad son muy lentos”, ha advertido.
A la vista de los resultados del estudio, Ochoa considera que niños y jóvenes han sido veraces. Le parece normal que su interés principal sea el deporte y el ocio, “pero me ha sorprendido que haya tanto interés por la ciencia”, ha reconocido. “Sin embargo, teniendo en cuenta que son hijos de su tiempo, es lógico que tengan un gran interés por la tecnología, ya que tiene un gran peso en su día a día”.
Además, Ochoa pensaba que iban a tener más interés por el medio ambiente. “Las respuestas, sin embargo, no sé hasta qué punto son conscientes de la importancia de los temas ambientales. Quizá tenga que ver con la imagen que se da en los medios de comunicación, ya que muchas de las noticias que aparecen sobre estos temas suelen ser negativas: contaminación, Garoña, problemas... Para cambiar esto tendremos que trabajar”.
Ochoa ha valorado especialmente la educación en la que los niños y jóvenes opinan. “Me parece maravilloso y diría que es el reflejo del esfuerzo que estamos haciendo. Además, el gusto por las nuevas tecnologías en los estudios demuestra que vamos por el buen camino”.
Al mismo tiempo, Ochoa ha destacado que los jóvenes son “prácticos”, “por eso les parecen útiles temas de ciencia y tecnología, aunque luego no se ven en el papel del investigador”. Sin embargo, cree que esto es normal porque “a los jóvenes les parece difícil y abstracto, sobre todo en comparación con un deportista o un empresario”.
Ochoa ha señalado que todavía hay una diferenciación entre géneros: “Las chicas siguen disfrutando de un mundo de ciencia y tecnología más humano, como la medicina y la salud, y los chicos más técnico. Es una foto de nuestra sociedad, que también hay que trabajar”.
En general, el estudio le ha parecido de gran utilidad y comparte la opinión del coordinador de la Cátedra de Cultura Científica de la UPV-DFB, Juan Ignacio Pérez Iglesias. Según él, “la primera condición para que una información sea útil es tener buena información, y yo creo que es buena, porque creo que han dicho lo que piensan, y prueba de ello es que casi todos han dicho que el deporte es lo que más les gusta, sobre todo los chicos”.
Además, Pérez Iglesias ha descubierto las cosas que esperaba y las que no esperaba. “Estas sorpresas son las que más me interesan, por ejemplo, los niños y los jóvenes tienen muy claro que la ciencia es útil por sus aplicaciones”. Pero a él no le gusta eso, “porque los mayores también piensan lo mismo, y para los que estamos en ciencia la ciencia no es eso. Para nosotros la ciencia es la herramienta para entender y conocer el mundo”.
En este sentido, Pérez Iglesias cree que quizá esté ahí el motivo de la bajada vocacional en materia de ciencias: “No acertamos a hacer entender que la ciencia es por sí misma interesante, no por posibles aplicaciones futuras”. Piensa que tienen la misma visión que los adultos, “y creo que en ese sentido habría que hacer un esfuerzo”.
Información adicional:
Informe Percepción sobre ciencia y tecnología de la juventud en Euskal Herria 2011 Resumen del informeZu idazle
Zientzia aldizkaria
