Elhuyar Fundazioa
En 1809 comenzó a estudiar jabones y como es sabido, la mayoría de las veces se fabrican a partir de grasas. Trató las grasas con ácido clorhídrico, quedando los ácidos orgánicos insolubles flotando en solución acuosa. Aisló ácido esteárico, ácido palmítico y ácido oleico, constituyentes más importantes de las grasas y aceites. Sin embargo, el esperma de la ballena se comportaba de manera diferente, por lo que Chevreule decía que no era grasa ni cera.
En 1825 Chevreule sacó la patente para fabricar velas mediante estos ácidos grasos (Gay-Lussac también simultáneamente). Hoy en día, debido al poco uso que hacemos de las velas, este avance de Chevreul y Gay-Lussac no tiene mucha importancia, pero el XIX. Tenía grandes ventajas para la sociedad de mediados del siglo XX. Las velas de ácido graso eran más fuertes y brillantes que las antiguas de sego, se quemaban más fácilmente y su olor no era tan malo.
Chevreule, sin embargo, además de las grasas, trabajó en otros campos. En 1815 aisló el azúcar de la orina de un diabético y comprobó que era el mismo azúcar que la vid. Es entonces cuando se empieza a tratar la diabetes como una enfermedad relacionada con el metabolismo del azúcar.
Chevreul también fue pionero en el estudio de las sustancias orgánicas y publicó en 1824 un libro sobre este tema. Más tarde se dedicó a investigar la psicología del color y trató de dar unas reglas generales en esta materia.
En sus últimos años, sobre todo a partir de los noventa, conoció mejor que nadie la influencia psicológica de la vejez y no hay ningún obstáculo para considerar a Chevreul como el precursor de la gerontología.
Vivió ciento tres años sin tener que pararse en el trabajo. Y es que durante su larga vida no tuvo tiempo de retirarse. Aprendió y vio muchas cosas en su vida. De joven se había visto cortando el cuello a las personas con la Revolución francesa y la guillotina. En la vejez también se construye la torre Eiffel.
Murió en París el 9 de abril de 1889 (hace cien años) y Elhuyar celebró el centenario del químico francés Chevreul. Creemos que merece esta mención en Ciencia y Técnica.