Elefantes en Australia

Larrañaga, Xanti

BAM Irakasleen Unibertsitate Eskolako irakaslea eta Ekologian doktorea

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Ed. Lucas Santana/CC-BY

Quizá habréis visto o escuchado lo que ha propuesto un artículo de opinión publicado en la revista Science: controlar una hierba que se ha convertido en invasora, introducir elefantes... Australia.

Una especie de hierba de origen africano ( Andropogon gayanus ) se introdujo y favoreció en la sabana australiana con la idea de que podía ser buena para el ganado. Esta especie, que alcanza los cuatro metros de altura, comienza a dispersarse incontroladamente en el continente, fuera del control de los herbívoros marsupiales y el ganado de origen. Abandona las especies vegetales originales, convirtiéndose en un nuevo combustible para los incendios tan habituales en este continente, hasta agravar sus daños.

Así, un investigador de la Universidad de Tasmania propone la introducción de sustitutos de los megabelarjantes, elefantes y rinocerontes, que desaparecieron de Australia hace 50.000 años. De esta forma, ambas especies animales se destinarían al control biológico de la hierba invasora, lejos de las tierras de su África de origen.

(des)Control biológico

Ejemplos de especies introducidas para el control biológico se pueden encontrar en Australia, pero no porque hayan funcionado, sino porque finalmente han provocado el desastre ecológico. Dos ejemplos son el zorro y el sapo de caña de azúcar. El caso del zorro es conocido: esta especie traída a Australia para continuar con la tradicional caza de zorros que se celebraba inicialmente en Inglaterra, fue favorecida para controlar el conejo que se estaba convirtiendo en una plaga (que estaba entre sus piezas de caza en Europa). En las tierras australianas, sin embargo, se encontraron piezas de caza en la fauna autóctona, mucho más fáciles de capturar por los zorros, que provocaron la desaparición o el colapso de numerosas especies sin afectar a la población de conejos. El otro caso representativo, aunque menos conocido, es el de la caña de azúcar. En Queensland, la agricultura de la caña de azúcar ha sido una actividad económica muy importante desde el traslado de la planta a Australia en el XVIII. En el siglo XX. Debido a los daños provocados por un escarabajo nativo en los campos de caña, y tratando de evitar remedios químicos, se introdujo el sapo Bufo marinus, originario de América Central y Sudamérica. A principios del siglo XX, con el objetivo de controlar el escarabajo. Fue una decisión de arrepentirse. Además de no afectar a la población de escarabajo que se pretendía controlar, se produjo un desastre para algunas especies australianas. Los animales que capturaban anfibios nativos australianos no coevolucionaron con el veneno de este nuevo sapo y muchos de los que morían o comían sapos eran mortales: las poblaciones de gatos marsupiales y de numerosos reptiles han sufrido una drástica disminución por este motivo. Bufo marinus sigue expandiéndose en Australia, sobre todo hacia el oeste; en la actualidad ha llegado a Australia Occidental con 2.000 kilómetros de viaje y no parece que pueda paralizarse por el momento.

¿Qué consecuencias puede tener la entrada de estos grandes herbívoros en Australia? ¿Qué daños podrían causar los elefantes o rinocerontes en el ecosistema australiano? Lo que está pasando con otra especie incluida en Australia, puede darnos pista.

XIX. A finales del siglo XX y principios del XX, miles de dromedarios y camellos fueron trasladados a Australia, animales adaptados a condiciones áridas que desempeñaron un papel importante en la exploración y transporte del continente. Cuando aparecieron los vehículos de motor y el tren se expandió, sin embargo, dejaron de utilizar los camellos y los camellos quedaron libres. Lo que inicialmente era una población de 20.000 individuos, ha llegado a alcanzar una población cercana al millón de individuos. Hoy en día es el mayor herbívoro que habita en Australia. En los lugares en los que se ha estudiado su dieta, se ha observado que se alimenta no sólo de hierba, sino también de todas las especies vegetales disponibles, talando a gusto árboles y arbustos. También son responsables de la extinción de algunas especies vegetales que les gustan. En condiciones húmedas, los camellos obtienen agua de la comida, pero tienen que beber en condiciones secas: un camello sed puede beber 200 litros de agua en tres minutos. Los daños que se producen en las infraestructuras en busca de agua generan unos gastos anuales de varios millones de euros y un riesgo en las carreteras por los accidentes que provocan.

Si bien se han realizado con la mejor intención y con el mejor conocimiento ecológico de la época, numerosas experiencias de control ecológico han tenido consecuencias biológicas y económicas penosas. Aunque la ingeniería ecológica ha tenido gran éxito en muchos casos, sobre todo en la restauración ecológica, parece que todavía no se pueden garantizar las consecuencias a la hora de manipular los ecosistemas. A pesar del ecosistema más simple, existen numerosas y complejas relaciones directas e indirectas entre especies autóctonas.

Al igual que la medicina no había avanzado mucho hasta que empezamos a conocer los componentes y el funcionamiento del cuerpo humano, no seremos capaces de manipular los ecosistemas hasta comprender bien las especies que los componen y sus relaciones. Se espera que los nuevos métodos utilizados actualmente en la recopilación y tratamiento de la información contribuyan a ello.

Tras la eliminación del hábitat, las especies exóticas invasoras son las mayores responsables de la pérdida de biodiversidad actual. Como hemos visto en los ejemplos, muchas de las especies utilizadas para el control biológico se han convertido en invasoras, causando mayores perjuicios que el problema que se pretendía resolver. Por un lado, me parece bastante difícil predecir (por mencionar uno) los efectos que pueden tener los elefantes sobre la vegetación de un nuevo ecosistema. Y por otro lado, aunque se propone hacerlo de forma controlada… ¿cómo se hace esto --no olvidemos - en zonas de miles de kilómetros cuadrados? Creo que llevar a los elefantes a Australia es añadir nuevos problemas a una situación difícil. Y además… ¿quién se atrevería a los elefantes invasores?

--> Y además: Crónica de desastres ecológicos, libros recomendados por Xanti Larrañaga

 

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