Los investigadores de la NASA descubren un anillo que gira alrededor de Saturno gracias al Telescopio Espacial Spitzer. No es un anillo cualquiera, es mucho más grande que el resto de anillos de Saturno. Las partículas más cercanas al planeta se encuentran a unos seis millones de kilómetros y las más alejadas a unos doce millones de kilómetros. Así, para equiparar el diámetro del anillo sería necesario colocar unos 300 Saturno juntos.
Mucho, por tanto, sí, pero no muy luminoso. Las partículas reflejan a gran nivel la luz infrarroja y los detectores de Spitzer la han detectado.