RUDOLF DIESEL

Azkune Mendia, Iñaki

Elhuyar Fundazioa

Este inventor alemán nació en París el 18 de marzo de 1858. Estudió en Francia y Alemania porque sus padres eran alemanes. Fue un buen estudiante y obtuvo una beca para la Escuela Politécnica de Munich, donde estuvo bajo la tutela de Carl von Linde, experto en frigoríficos.

Durante dos años trabajó como mecánico en Winterthur (Suiza) y posteriormente regresó a París para trabajar como ingeniero de termología, instalador y vendedor para una empresa de refrigeración internacional.

El invento más importante de Diesel fue el motor Diesel. En 1890 comenzó a experimentar con motores de combustión interna y en 1897 realizó lo que ahora se conoce como motor diesel. Este motor, considerado como un prototipo, era similar al de los motores de explosión (Otto), pero no funcionaba igual. Los motores otto funcionan haciendo estallar la mezcla de combustible y aire mediante una chispa de bujía. En los motores diesel, por el contrario, el aire se comprime y se mezcla el combustible. En ese momento, la mezcla sólo se enciende sin chispas ni bujías.

Es la principal diferencia entre los motores de gasolina y gasoil. En el motor de gasolina el aire mezclado en el carburador y el combustible entran en el cilindro, y cuando el pistón comprime la mezcla se saca la chispa en la bujía y se forma la explosión. En el motor diesel de gasóleo, sin embargo, se introduce aire puro en el cilindro y se calienta mucho porque el pistón comprime más que en el motor de gasolina. Cuando el aire comprimido está muy caliente se inyecta el gasóleo rociado en su interior y se explota espontáneamente sin chispas.

La ayuda económica que el Sr. Diesel necesitaba para hacer su motor fue concedida por un cervecero estadounidense de Saint Louis, por lo que el primer motor Diesel se fabricó en Estados Unidos.

Las ventajas de este motor eran la posibilidad de utilizar aceites más pesados o gasóleo, el menor volumen del motor, la no extracción de humos del motor, la reducción del precio del combustible y la mayor seguridad del mismo. Pero en aquella época también tenía sus desventajas: El motor diesel era pesado y no servía para coches ligeros fabricados por Ford, ni para aviones.

Sin embargo, este invento atrajo la atención de la marina y, invitado por el Almirantego Británico, el 29 de septiembre de 1913 zarpó en el barco de Dresde en Amberes. Durante el viaje entre este puerto y Harwich cayó en el mar de forma inesperada y murió ahogado.

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