La explosión del volcán Pinatubo tuvo y seguirá afectando más de lo esperado en los próximos años. La explosión se produjo en 1991 y, como hemos podido comprobar recientemente, sus consecuencias han llegado hasta la costa del Mar Rojo. Un grupo de investigadores israelíes ha afirmado que el calor resultante de la explosión se extendió junto con el lava a través de la superficie del mar y que los corales que se encontraban a cientos de kilómetros del lugar donde se produjo la explosión también se han visto afectados.
Según estos datos, el calor generado por la explosión se ha producido principalmente en los dos últimos años. El calor generado por el volcán destruyó completamente el 20% de los corales alrededor del Golfo de Rota y el resto quedó en una situación muy grave. De hecho, la proliferación indiscriminada de alimentos acuáticos se ha producido por el calor y se ha producido un predominio de la salinidad que los corales no pueden soportar.