Muchos estudios han demostrado cómo los pigmentos y las nanoestructuras internas de los seres vivos producen color, pero a los científicos aún les llamaba la atención el intenso color negro que tienen algunas aves. Las aves del paraíso endémicas en Australia (Paradisaeidae), por ejemplo, utilizan plumas supernegras para destacar sus coloridas manchas. Investigadores de la Universidad Harvard han aclarado que la base de estas plumas supernegras podría tener una microestructura específica de los lúmenes.
De hecho, el color negro se produce cuando se produce la absorción total de la luz visible. En el caso de las aves negras típicas se refleja en torno al 5% de la luz, mientras que en el caso de las aves paraísas sólo se refleja el 0,05% de la luz. Por tanto, absorben casi 100 veces más luz que los primeros, al igual que los materiales ultra absorbentes creados por el hombre.
Según los científicos, las plumas supernegras presentan una estructura morfológica más compleja que las plumas negras convencionales: en lugar de fibras simples, presentan fibras ramificadas e inclinadas verticalmente. Los investigadores atribuyen a estas estructuras la capacidad de absorber más luz visible. El trabajo ha sido publicado en la revista Nature Communication.