Científicos del CNRS se encuentran con una paradoja ecológica al encontrar el plancton marino sumergido en los ámbar. El ámbar guarda muy bien a los seres vivos que quedaron atrapados en la resina que hubo en su día, pero es imprescindible que los vivos lleguen hasta la resina. Esto sería imposible para los habitantes del mar. Pero tuvo que suceder de alguna manera, ya que los han encontrado. Según los científicos, la explicación más posible es que los árboles resinosos estaban cerca del mar y que en alguna tormenta el agua del mar llegó hasta él.