El origen de los vascos, relacionado con los primeros agricultores de la península Ibérica

Galarraga Aiestaran, Ana

Elhuyar Zientzia

Un grupo de investigación internacional liderado por la Universidad Uppsala ha demostrado que el origen genético de los vascos de hoy está relacionado con los campesinos más antiguos de la Península Ibérica. De hecho, han analizado los genomas de ocho seres humanos que vivían en Atapuerca hace 3.500-5.500 años y han llegado a la conclusión de que la población más emparentada con los vascos es la actual.
euskaldunon-jatorria-iberiar-penintsulako-lehen-ne
Uno de los esqueletos del yacimiento de El Portalón. Ed. Javier Trueba/Madrid Scientific Films

Los primeros estudios realizados con el antiguo ADN sugirieron que los primeros agricultores europeos llegaron a los continentes por el este, sustituyendo a las poblaciones cazadoras-recolectoras del lugar. Estudios posteriores han negado esta hipótesis. Al parecer, los dos grupos se equivocaron y sus sucesores son los europeos de hoy.

Sin embargo, la mayoría de estos estudios se han llevado a cabo en el norte y en el centro de Europa, por lo que tenían muy poca información sobre lo ocurrido en el sur de Europa y en concreto en la península Ibérica. Ahora, en colaboración con la Universidad de Uppsala, investigadores de la Universidad de Burgos y del centro ISCIII-UCM se han centrado en la población de la cueva de El Portalón de Atapuerca, obteniendo datos significativos.

Los resultados han sido publicados en la revista PNAS. Eneko Iriarte Aviles ha sido uno de los participantes en la investigación. Es investigador de la Universidad de Burgos y destaca que hasta la fecha se han realizado muy pocas investigaciones con el ADN antiguo: “Hasta el momento no había tecnología para separar el ADN de los fósiles del ADN de nosotros y de otros seres vivos de nuestro entorno. Es una tecnología muy nueva y nosotros hemos sido pioneros en utilizarla”.

Mediante esta tecnología, los humanos de El Portalón han sido estudiados. Y descubren que los primeros agricultores de la península Ibérica llegaron a Atapuerca desde Oriente Próximo por la costa mediterránea. En Atapuerca se mezclaron con los cazadores-recolectores locales y han visto que esta mezcla fue progresiva: “En el genoma de los fósiles más antiguos de El Portalón, hace 5.500 años, no se aprecia mucho la huella de los cazadores-recolectores locales, mientras que hace 3.500 años su huella es mucho más evidente”, explica Iriarte.

Las raíces de los vascos

Además, han comparado su genoma con el genoma de las poblaciones actuales. Y se dan cuenta de que los vascos son el grupo con mayor parentesco genético con ellos. Según Iriarte, al ser el único vasco del grupo, le ha creado una “auténtica emoción”: “Era conocido que los vascos somos genéticamente diferentes de las otras poblaciones europeas. Y ahora hemos visto por qué: mientras otros grupos se han mezclado con el resto de grupos que han venido de fuera, nuestros antepasados apenas se mezclaron. De alguna manera, han vivido en un aislamiento milenario”.

Una espina del yacimiento de El Portalón. Ed. Javier Trueba/Madrid Scientific Films

En este sentido, el director de la UCM-ISCIII, Juan Luis Arsuaga, ha destacado que ello desvirtúa que los vascos son herederos directos de las poblaciones del Paleolítico, a pesar de que algunos lo han considerado.

Por otro lado, los sardineses también han demostrado su parentesco genético con la población de El Portalón. Esto confirma que los primeros campesinos vinieron de Meditarreno. Y, comparando el euskera antiguo con el paleosardino, los investigadores también han extraído otras conclusiones. Al parecer, hay similitudes entre ambas lenguas. “Teniendo en cuenta esto, y sabiendo que estos campesinos no sólo transmitieron genes, sino también tecnología y cultura, no es un despropósito pensar que también les transmitieron la lengua”, ha afirmado Iriarte. Es decir, que es posible que las raíces del euskera estén en el idioma de aquellos campesinos que vinieron de Oriente Próximo.

Si bien lo han sugerido también en el artículo publicado en el DAP, Iriarte advierte que se trata de una hipótesis: “Es una conclusión lógica, pero los lingüistas tendrán que demostrar si es correcta”.

Babesleak
Eusko Jaurlaritzako Industria, Merkataritza eta Turismo Saila