Según un estudio llevado a cabo por el doctor Donald Landry y su equipo de la Universidad de Columbia, una enzima puede romper las moléculas de cocaína y de crack en la sangre y así reducir la relación con la droga que tienen los toxicómanos.
La enzima es un anticuerpo monoclonal catalítico (AMK). El anticuerpo es porque se asocia a un antígeno específico y, si se llama catalítico, es porque divide la molécula en dos productos inertes. La ventaja clínica consiste en actuar con rapidez frente a otros productos. Por ejemplo, la antidroga clásica denominada desipramina no afecta hasta unas semanas.
El producto no se comercializará este año y cuando se comercialice se tomará por inyección.