Tenía un récord de seguimientos realizados desde el satélite, que siguieron durante 2.033 días a la cigüeña llamada Donna a través de un emisor asentado en la espalda. La cigüeña era blanca (Ciconia ciconia) y se encontraba en edad fértil cuando murió.
Donna formaba parte de la campaña "Cigüeñas sin fronteras" puesta en marcha en Bélgica. Desde su instalación en 1999, los biólogos han analizado las características del ave. Gracias a ello saben que en 2004 intentó reproducirse en Bretaña, pero no lo consiguió. Además, a través de esta técnica han conocido los últimos días de su vida.
Que partió de Sevilla el 11 de febrero de 2005, estando diez días en la zona de Madrid y llegando el 4 de marzo al Calvados de Bretaña, el mismo lugar del año anterior. Pero al día siguiente fue encontrado muerto, cerca del estuario del río Sena. Le han hecho un seguimiento diario, pero no han podido evitar la muerte de Donna. El animal murió en el cable de alta tensión por una descarga eléctrica.
Los cables de alta tensión suponen un gran riesgo para las aves, pero este problema puede ser resuelto según los biólogos. En el parque natural de Doñana, por ejemplo, los cables fueron enterrados, lo que disminuyó rápidamente el número de aves muertas.