Dos para andar, seis para ocultar

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Dos pequeños pulpos de los trópicos son capaces de caminar a dos patas cuando quieren huir de los agresores. Además, otros seis brazos son utilizados para cambiar de aspecto.

El pulpo octopus marginatus, por ejemplo, habita en el mar de Indonesia y en su fondo marino hay numerosos cocos. De hecho, adquiere su aspecto cuando concentra los seis brazos alrededor del cuerpo. Los otros dos los utiliza para hacer fama.

El otro pulpo, algo más pequeño y en forma de algas, es Octopus aculeatus. Se esconde de los rascadores gracias a la forma de algas y, como el otro, es capaz de caminar a dos patas.

La investigación ha sido publicada en la revista Science, pero los investigadores creen que todavía hay muchas cosas que saber sobre los pulpos.

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