Para investigar los mecanismos del miedo y la ansiedad se está utilizando una vida microscópica:Lombriz de Caenorhabditis elegans. Colocados en el suelo los sulfolípidos que segrega sus predadores naturales, C. elegans adopta un comportamiento de autoprotección: cambia bruscamente de sulfolípidos cambia bruscamente de dirección y deja de poner huevos. Los investigadores del Instituto Salk han descubierto que la mera presencia de estos fluidos activa cuatro circuitos neuronales, y han afirmado que el miedo, mecanismo rudimentario y básico, provoca una respuesta neuronal muy parecida en gusanos y seres humanos.
Cuando les han administrado el medicamento Zoloft contra la ansiedad humana, las lombrices no han mostrado miedo a los sulfolípidos. A la vista de la influencia del medicamento en ellos, parece que las respuestas neuronales contra el miedo se han mantenido en la evolución. Los investigadores esperan que la identificación de señales relacionadas con el miedo en el sistema nervioso de las lombrices ayude a comprender mejor los mecanismos y la naturaleza de la ansiedad.