En la última reunión celebrada por la Sociedad de Ciencias del Sistema Terrestre (ESSP) se ha presentado el resultado de un estudio económico en el que el número de coches privados aumentará de 600 millones a 1.400 millones y 2.700 millones para 2050. La predicción que han hecho al respecto es que se emitirá doble o cuádruple cantidad de dióxido de carbono.
En la actualidad, la tendencia principal es el uso de coches privados, el modo de transporte más utilizado. La gente compra cada vez más coches y esta tendencia se está extendiendo, sobre todo a Asia. En Asia, los productos derivados del petróleo son cada vez más destinados al suministro de coches.
El transporte es el principal combustible fósil y se cree que seguirá siendo así en el futuro. Esto supone la necesidad de desarrollar nuevas fuentes de energía para el transporte. Afortunadamente, están investigando y desarrollando coches que utilizan biocombustibles, hidrógeno o eléctricos. La continuidad de estos estudios es urgente para evitar en la medida de lo posible las emisiones de dióxido de carbono.