La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado el año 2020 Año Internacional de las Enfermeras y Matronas. En su opinión, las enfermeras y las matronas juegan un papel decisivo en el ámbito sanitario, ya que tienen una relación directa y efectiva con la ciudadanía para asesorar en salud, participar en la planificación familiar, vacunarse y prestar cuidados continuos a los pacientes. Así, la OMS ha anunciado la necesidad de 9 millones más de enfermeras en el mundo para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible para 2030 y alcanzar la cobertura sanitaria universal. Por un lado, para que tengan más recursos para atender a los pacientes, pero también para que participen en la política sanitaria y asuman responsabilidades en los puestos de responsabilidad.
Entre los objetivos de desarrollo sostenible para 2030 se encuentran, entre otros, asegurar el acceso universal a los servicios de planificación familiar; reducir la mortalidad de los niños menores de cinco años al 2,5%; acabar con las epidemias del sida, la tuberculosis y la malaria; poner a disposición de todos los medicamentos y vacunas seguras; reforzar las medidas para evitar el uso abusivo de sustancias adictivas; y reducir considerablemente el número de enfermos y muertos por contaminación del aire, el agua y la tierra.
Así, las enfermeras y los enfermeros. La OMS dice que deberían situarse en el centro de los retos de salud del siglo XX. Recuerda que suponen el 50% del personal sanitario. Es más, en muchos países existe un primer y único servicio de servicios médicos. Además de la técnica de conocimiento, la de las enfermeras y matronas es un trabajo que requiere mucha intuición y sensibilidad, por ejemplo, para cuidar a los enfermos, o para ayudar a las mujeres que dan a luz y a las personas que mueren de puerta. La OMS reivindica la necesidad de visibilizar y reforzar sus trabajos.