Cedric Villan cuenta el proceso hasta conseguir un resultado matemático importante. Se le convierte en una obsesión, pero eso no es especial, ya que ocurre lo mismo cuando varios científicos persiguen un objetivo. Sin embargo, en el caso de Villani hay otra intención que no oculta desde el principio: Obtención de la medalla Fields en 2010, última oportunidad por edad. Después de haber ganado unos premios por el trabajo realizado hasta el momento, sabe que puede ser candidato a Fieldse y cree que un buen resultado le ayudaría mucho.
Se trata de un proyecto realizado en colaboración con Clement Mouhot, alumno de tesis y colaborador. Trabajan de forma "moderna". No son muchas las veces que están juntas, pero están en contacto continuo a través de Internet. Muchas partes del libro son correos electrónicos que se envían entre sí. Escribir un mensaje y pasados unos minutos otro y después otro.
Villan no puede interrumpir. A pesar de estar con la familia, también en casa necesita espacios para seguir con lo que está dando vueltas.
Demuestra confianza en conseguirlo, pero también dudas. También menciona algunas de sus charlas sobre el tema, con el trabajo aún sin terminar, y el nerviosismo que ello le genera, ante las preguntas que le van a realizar los oyentes expertos. Al final, todo ello servirá a los autores para ver los puntos débiles de la obra y mejorar la versión final. Esto fue lo que se aceptó para su publicación, tras rechazar la primera versión.
Los temas y lugares son también excusa para lanzar personajes. Unos históricos (de la historia de las matemáticas) y otros de hoy.