Material incombustible sorprendente

Lo que ha conseguido el señor británico Maurice Ward es curioso y sorprendente: “plástico” capaz de soportar una temperatura de 10.000 (diez mil) ºC. Los expertos en investigación con polímeros han sorprendido que este nuevo material no se estropee a temperaturas diez veces superiores al límite del plástico más termoestable.

Este señor de sesenta años quedó emocionado en 1985 al ver muertas 54 personas en el aeropuerto de Manchester por un incendio en un avión. Es conocida la muerte por inhalación de humos procedentes de la combustión de plásticos en caso de incendio. Las 54 personas mencionadas también murieron así. Por ello, desde el desastre de Manchester ha tratado de conseguir un plástico incombustible y en 1989 tenía listo el material que soportaba la llama del soplete sin que saliera humo.

El Sr. Ward explicó su logro, es decir, el material que él llama Starlite (luz estrella), pero al principio la gente no se agitó mucho. De hecho, no era de creer que lo que los químicos más prestigiosos del mundo nunca habían conseguido nunca lo tuvieran preparado un señor durante tres meses, como decía el Sr. Ward.

El peluquero Ward prueba con soplete su misterioso Starlite.

Por otro lado, era difícil que aquel logro fuera copiado de ningún laboratorio, ya que el Sr. Ward era un peluquero profesional. Por eso, todo lo que él dice no genera más que desconfianza en los científicos. Además el Sr. Ward da muy poca información. El nuevo producto se compone únicamente de plásticos, cerámicas y aditivos. Tampoco ha solicitado ninguna patente, ya que para ello debería proporcionar la composición del material. Además, cualquiera puede leer los informes de las patentes y bastaría con cambiar uno u otro componente del material para hacer y copiar otro similar. El Sr. Ward utiliza la muestra del material siempre presente. Permite realizar el ensayo, pero lo recoge en cuanto termina.

Sin embargo, el material tan resistente al fuego no podía ser descartado para siempre, sobre todo por la facilidad de realizar pruebas de ensayo. Los militares estaban muy interesados por la resistencia de materiales láser y la Weapons Establishment de Gran Bretaña ha revelado por televisión las sorprendentes características del material Starlite. El rayo láser se focaliza en un punto y se mantiene durante dos minutos a una temperatura de 10.000 ºC. El material no se ha deteriorado.

Se han realizado otros ensayos. Tras una pantalla de starlite se puso un huevo y se calentó con un soplete de acetileno. No se coceron huevos. Incluso el huevo no se calentó.

Desde entonces se han realizado numerosas pruebas para medir las características del nuevo material. En un laboratorio le lanzan el chorro de plasma que utilizan habitualmente para cortar placas de acero de espesor centimétrico. También se han realizado 75 pruebas simulando la explosión atómica, y una hoja de 0,25 mm de espesor ha resistido el calor que desprende el acero de 2 cm de espesor. Por tanto, este material es totalmente incombustible, un sorprendente aislante térmico.

El Sr. Ward ha sido finalmente aceptado por las editoriales científicas y reconocido como material de alta tecnología por la revista Jane’s International Defense Review. La gente de los gobiernos y de las industrias privadas también está ahora detrás. Parece que quieren utilizar el nuevo material en aplicaciones militares (como satélites), pero la aplicación civil puede ser muy extensa: protección contra incendios en aviones en línea, aislamiento térmico en casas, protección contra incendios en pozos de petróleo y almacenes, etc. El starlite es un material que en los incendios no extrae humos tóxicos como en otros plásticos.

Sin embargo, hay puntos que aún no se han aclarado. Se desconocen los minutos en los que el material Starlite puede soportar las máximas temperaturas. Ni que resistan temperaturas más bajas pero relativamente altas durante mucho tiempo. Por otro lado, se desconoce la resistencia mecánica de este plástico a altas temperaturas.

El problema de Starlite no sería la temperatura de fusión, sino la resistencia a la alta temperatura de una llama. Y estos son dos conceptos. Los espacios, por ejemplo, cuando vuelven a la Tierra tras orbitar, tienen una temperatura en la superficie de alrededor de 1500ºC por fricción atmosférica. Por ello, le colocan como protección un escudo, que no suele estar fabricado con materiales de difícil calentamiento, sino con una resina orgánica (fenólica o epoxi) cuyo punto de fusión es sólo de unos 150 ºC. De esta forma, con el rozamiento atmosférico, la resina se evapora bruscamente y este gas protege la superficie del espacio, situada entre el aire atmosférico y el fuselaje.

Cuando al material Starlite se acerca la llama del soplete no sale gas. Por tanto, este material está compuesto principalmente por minerales, que utilizan el plástico como enlace.

Sin embargo, todavía es demasiado rápido afirmar que este material va a suponer una revolución tecnológica. Compañías importantes de la industria química dejaron de investigar plásticos con interesantes propiedades térmicas hace unos diez años. Las dificultades para trabajar y el precio son las principales barreras. Si el punto de fusión de estos plásticos es de sólo 350ºC y hay dificultades para la producción, ¿cómo se trabajará el Starlite de 10.000 ºC con extrusión o moldeo? Parece que la única manera de trabajar será con láminas finas, pero el Sr. Ward dice que tiene el nuevo sistema para trabajar su material.

Mientras tanto, el Sr. Ward está esperando y, en caso de dejar su invento a nadie, afirma que es obligatorio tener en su poder la mayoría de las acciones de la empresa. Si no es así, no quiere tratar.

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