El centro tecnológico Ikerlan de Arrasate-Mondragón, miembro de la alianza IK4, ha sido seleccionado para liderar el proyecto europeo Optolab Card. El objetivo del proyecto es desarrollar un dispositivo de diagnóstico rápido y eficaz de enfermedades infecciosas. De hecho, las enfermedades infecciosas se están desarrollando cada vez más debido a la mayor movilidad de las personas portadoras.
El dispositivo correspondiente al proyecto que dirige Ikerlan tendrá una base portátil y una tarjeta que funcione como laboratorio. Esta tarjeta detectará las bacterias causadas por enfermedades infecciosas, detectando en tiempo real su ADN. Para empezar, la tarjeta extraerá las bacterias que en cada caso interesen. La membrana de estas bacterias se rompe y realiza varias copias del ADN liberado mediante métodos bioquímicos. Todo este proceso se realizará automáticamente. A continuación, la base portátil emitirá un rayo de luz. De esta forma se recibirá una señal óptica de la bacteria que contiene la muestra, y el usuario, según la señal recibida, sabe si la muestra está infectada o no, es decir, si tiene o no enfermedad.
En el desarrollo de este dispositivo participan el centro tecnológico Gaiker (IK4) y la Fundación Vasca para la Innovación+ +Investigación+Salud (BIOEF), así como centros tecnológicos y empresas de Alemania, Austria, Suecia, Dinamarca y Polonia. El plazo de ejecución del proyecto es de tres años y se estima que para poder comercializar el nuevo dispositivo serán necesarios tres años más.
El laboratorio óptico miniaturizado en la tarjeta tendrá el tamaño de un teléfono móvil y servirá inicialmente para detectar la salmonelosis, el patógeno con mayor incidencia en la Unión Europea (40,7 personas por 100.000 habitantes). No obstante, el nuevo dispositivo tendrá la capacidad de detectar y separar las cadenas de ADN, de forma que su capacidad de diagnóstico sea amplia, no limitándose únicamente a la salmonellosa. También se puede adaptar para detectar enfermedades infecciosas como la gripe, la tuberculosis, la hepatitis o el sida.
La tarjeta tiene otra ventaja: Será el primer sistema que ofrecerá un diagnóstico rápido de una enfermedad infecciosa durante 15 minutos. En la actualidad, los métodos analíticos convencionales suelen tener protocolos muy largos, por lo que las pruebas requieren un tiempo mayor, que oscila entre 6 y 2 horas aproximadamente. Es decir, tiempo suficiente para contaminar toda una comunidad o gran parte de la población.
La Tarjeta de Laboratorio también contará en el futuro con otras aplicaciones. También podrá utilizarse para la detección de enfermedades genéticas, pruebas de paternidad, diagnóstico más precoz del Parkinson, Alzheimer, medicina forense, etc.
Esta tarjeta de laboratorio aportará probablemente algunos beneficios al sistema sanitario. Los responsables del proyecto consideran que habrá menos ingresos, que se acortarán las estancias hospitalarias y que se reducirán los costes asociados al diagnóstico. Además, consideran que disminuirán los casos de personas infectadas con enfermedades infecciosas.