El futuro viajará por hidrógeno

Kortabitarte Egiguren, Irati

Elhuyar Zientzia

En cada casa hay un coche, dos y hasta tres, y la tendencia a coger el coche es espectacular. En la mayoría de los casos estamos acostumbrados a conducir coches con gasolina. Aunque la conducción de un coche que vaya a moverse por una pila alimentada por hidrógeno puede considerarse hoy una utopía, los expertos en la materia están trabajando para poder hacerlo en el futuro.
El futuro viajará por hidrógeno
01/09/2008 | Kortabitarte Egiguren, Irati | Elhuyar Zientzia Komunikazioa
(Foto: Tecnalia)

La Unidad de Energía de Tecnalia presenta un prototipo de coche silencioso y barato que funciona con pila de combustible alimentada por hidrógeno. Recibe el nombre de H2CAR. Tiene motor eléctrico y la electricidad la genera una pila de combustible que utiliza hidrógeno. Además, tiene una batería auxiliar. Según sus creadores, esta es la principal novedad. Es decir, un coche mixto que utiliza la batería y el hidrógeno.

Barato y silencioso

Como todo vehículo automático, sólo tiene acelerador y freno. El maletero dispone de una botella de hidrógeno para alimentar la pila de combustible que producirá la electricidad necesaria para el funcionamiento del vehículo. La batería le proporcionará una fuerza de aceleración adicional. La batería se carga en unos minutos en una toma de 220 V, al igual que los teléfonos móviles.

El prototipo actual puede recorrer 200 kilómetros con cada carga y aún no es capaz de superar los 60 km/h. En cuanto al coste por kilómetro, Luis Pedrosa, director de la Unidad de Energía de Tecnalia, ha destacado que "llenar el depósito, es decir, cargar la batería del vehículo eléctrico y la pila de combustible, cuesta entre 6 y 8 veces menos que llenar el coche que utiliza gasolina para conseguir la misma autonomía". De ahí que haya sido literalmente bautizado. Silencioso, ¿por qué? El sonido habitual de la rodadura y el sonido ligero emitido por el sistema de refrigeración del motor eléctrico y la pila de combustible son percibidos durante la conducción.

Además de ser barato y silencioso desde el punto de vista ambiental, el escape de H2CAR no emite dióxido de carbono sino vapor de agua. De hecho, cuando en la pila de combustible se combina el hidrógeno con el oxígeno y se obtiene electricidad, en esta reacción sólo se emite agua. En este proceso "podemos decir que se reducen al menos un 80% las emisiones del vehículo respecto a los coches convencionales", ha añadido Pedrosa. Y es que ha habido emisiones tanto en centrales de producción de hidrógeno como de generación eléctrica.

La industria del automóvil no duda de que el vehículo del futuro será eléctrico. Sin embargo, la generación de esta electricidad por una pila de combustible que utiliza hidrógeno debe resolver los problemas actuales del hidrógeno.

El problema del hidrógeno

Por el escape de H2CAR se emite vapor de agua y en el maletero hay una botella de hidrógeno para alimentar la pila de combustible que producirá la electricidad necesaria para el funcionamiento del vehículo.
Tecnalia

"El hidrógeno puede convertirse en una oportunidad, pero todavía hay muchos retos que afrontar para que el hidrógeno sea una alternativa razonable: producción eficiente a gran escala, almacenamiento, seguridad...", explica Javier García-Tejedor, director adjunto de la Unidad de Energía de Tecnalia.

"En la actualidad, la mayor parte del hidrógeno se obtiene a partir de hidrocarburos. En el futuro, el hidrógeno debería ser producido a partir del agua". Lo que está claro es que hay que producir. "Porque el hidrógeno no es una fuente de energía, ya que no se puede tomar de la naturaleza", ha recordado García-Tejedor.

Con este prototipo de vehículo, Tecnalia quiere demostrar la viabilidad del vehículo eléctrico de hidrógeno como alternativa real de transporte. Ahora quiere desarrollar las tecnologías necesarias para su utilización práctica y esperan que en algún momento en las carreteras sólo se vean coches con pilas de combustible alimentadas por hidrógeno. Pero todavía queda mucho por hacer. No se espera que el hidrógeno se expanda antes de 2020 o 2030 para su uso normal.

Once líneas de trabajo para el futuro
El vehículo sigue siendo un prototipo y los empleados de Tecnalia están trabajando seriamente en la mejora. Son once las líneas de trabajo a futuro. Por un lado, los nuevos depósitos de almacenamiento de hidrógeno, como los depósitos ligeros que almacenan el hidrógeno en 800 bares, quieren desarrollar un sistema de recarga directa de hidrógeno a presión en el vehículo. Por otro lado, quieren incrementar las prestaciones de las baterías incorporando baterías de última generación. También se está estudiando la posibilidad de recuperar de forma eficiente la energía utilizada en la frenada. La transformación de esta energía cinética en electricidad podría aumentar la autonomía del vehículo. Asimismo, se pretende añadir una interfaz de información al conductor que permita al conductor conocer en todo momento el estado del vehículo y su entorno (tráfico, señalización, estado de las carreteras, etc.). Y muchos más.
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