Fotos en pantalla de ordenador
Las cámaras fotográficas que utilizan un sistema numérico o digital presentan ventajas extraordinarias respecto a las convencionales. Porque no cogen la foto en la película, sino en un disquete, y luego la imagen se puede ver en la pantalla del ordenador. Con la imagen en la pantalla se puede tocar, clasificar, poner el pie, etc. antes de guardarla en el disquete, disco duro o CD (disco compacto). Mediante el módem y la línea telefónica se puede enviar la imagen a cualquier lugar del mundo.
En los últimos tiempos las cámaras con disquete (y no película) como soporte fotográfico están entrando con fuerza en el mercado. Las cámaras electrónicas pueden ser analógicas o numéricas (digitales) dependiendo del tipo, pero en cualquier caso se ve claramente los problemas que suelen darse para proyectar las diapositivas (se necesita una habitación oscura, encontrar una distancia adecuada entre proyectores y pantallas, no colocar las fotos al revés, etc.) que finalizarán en breve.
Como todos sabemos, en las viviendas ya hay muchos monitores de televisión que son videoconsolas y que está funcionando como pantalla de cine, pero a partir de ahora no sólo hay películas, sino también fotos propias (a familiares, de vacaciones, etc.) los podrá ver. Además, asociados al ordenador, los profesionales podrán clasificar sus archivos, colocar pies de imagen, “tocar” las imágenes o enviarlas telefónicamente a cualquier lugar. Durante la Guerra del Golfo, periodistas japoneses y estadounidenses probaron este sistema.
Cámaras analógicas
El año 1992 que acabamos de atravesar ha sido el de la fotografía numérica. Ya se conocía la fotografía electrónica analógica. En estas cámaras la imagen se registra como señal analógica continua (como en la banda de vídeo), pero en las denominadas cámaras numéricas o digitales la imagen se convierte en un conjunto de datos informáticos (son los datos obtenidos por la combinación de uno y cero), cada dato corresponde a un píxel de la imagen (es la abreviatura de los términos picture ³) o a un cuadradito. En todas estas cámaras se sustituye la película de emulsión convencional por un soporte de base CCD ( Charge Coupled Device ) que convierte la luz en señal eléctrica mediante células fotosensibles.
Canon lleva dos años ofreciendo su sistema Ion. Es un aparato magnético denominado Still Video Camera (videocámara de imagen fija) y unas 120.000 pts. Válido. En un pequeño disquete de 2 pulgadas (unos 5 cm) de diámetro puede registrar 50 imágenes en color. La imagen se toma en el disquete en 235.000 píxeles (786x300), pero como en las casetas de música se puede eliminar cuando se quiera, para dar paso a otro.
Para ver las imágenes basta con conectar la cámara a la televisión como los magnetoscopios o los camiones directamente a la entrada Y/C. Se pueden pasar por la pantalla a través de un telemando que se suministra con el aparato, después de realizar la suma de fotos. Estas imágenes se pueden recoger en vídeo y pasar a modo de diaporamas, música, palabra, etc. adjunto.
Y a las fotos “antiguas” que tenemos ya hechas, ¿qué hacemos? No hay por qué preocuparse. Las diapositivas o fotos negativas que ya tenemos pueden retratarse con la cámara Ion y pasarse al disquete 30.000 ptas. mediante un acondicionador de valor ambiental. De este modo, el fotógrafo profesional puede clasificar sus fotografías por temas, por años o según desee y luego verlas rápidamente en la televisión sin utilizar originales cuando lo desee.
Otras casas también han lanzado nuevas cámaras analógicas. Nikon tiene a la venta el modelo QV-1000 C, Sony lleva el nombre de ProMavica, además de algunos modelos de Olympus y otros de Minolta. Aunque de momento sólo se vende en Japón y Estados Unidos, la cámara ProMavica es de tipo reflex y acepta todos los objetivos de Canon, Nikon y Sony. Para la señal roja, verde y azul (para cada una de ellas) dispone de un sistema de triple CCD que permite obtener una imagen de 380.000 píxeles.
Cámara totalmente digital
También se han incluido cámaras que captan la imagen digitalmente: Por ejemplo, los DCS (Digital Camera System) de Logitech o Photoman o Kodaks. Al conectarse directamente al ordenador, las imágenes se pueden tratar inmediatamente. La cámara Photoman es pequeña y 140.000 ptas. Valor ambiental. Es muy ligero y la distancia focal es fija (equivalente a 55 mm en cámaras clásicas), con una definición de 106.000 (376x282) píxeles que puede tomar 32 imágenes para blanquearse.
Las imágenes se almacenan en un chip de cámara (RAM) y se pueden conectar en cualquier momento al microordenador de la oficina o del hogar, por ejemplo a un PC o compatible. Las imágenes se ven así en la pantalla del ordenador. Además, el programa Fototouch permite tratar las imágenes en 256 tonos de gris. Una vez guardada la imagen, se puede utilizar en todo: para la edición electrónica, para completar el archivo, para enviarla por módem a cualquier lugar, etc. Dado que la imagen ocupa aproximadamente 100 kilobytes, en un disquete normal de 1,4 MB se pueden insertar 14 imágenes.
El modelo DCS de Kodak es mucho más avanzado. Se basa en el F3 reflexa de Nikon (por lo que se puede utilizar toda su gama de ópticas) pero se sustituye la película por un soporte CCD de 1.280x1.024 píxeles. En el soporte DM3 se toman figuras de blanqueo y en el soporte DC3 de colores. Tienen una definición de 1,3 millones de pixels y se puede decir que equivalen a la calidad que se consigue en la televisión de alta definición. La sensibilidad de CCD se asemeja a las películas de sensibilidad ISO 200-400 de la emulsión de plata en las figuras de colores y a la de 400-800 isos en las de blanqueado. Esta cámara también tiene motor y es capaz de tomar 2,5 imágenes por segundo. Al tener una memoria de 8 MB (ampliable hasta 32 MB), se puede sacar al golpe un juego de seis figuras (o 24). Estas imágenes capturadas se vacían a una memoria digital llamada DSU ( Digital Storage Unit ).
La memoria pesa seis kilos y el fotógrafo cuelga en una caja. Tiene una capacidad de 200 MB y pueden incluirse 156 fotos (6 rollos de 36 fotos), pero si se comprimen las imágenes se pueden incluir hasta 600 fotos en la memoria. La mencionada memoria DSU está alimentada por una batería de 12 V y además del teclado de mando cuenta con una pequeña pantalla de 10 cm para poder visualizar y controlar inmediatamente las fotos registradas. A diferencia de las cámaras de Ion y Logitech de Canón, Photoman, con el DCS de Kodaken, el fotógrafo tiene plena autonomía, ya que puede controlar su trabajo en cualquier momento, independientemente de dónde esté.
Las imágenes de DCS pueden pasar al ordenador Macintosh (modelo II o SE/30 por ejemplo) o al PC por la puerta SCSI. Además, la cámara DCS (y también Photom) se puede conectar al ordenador portátil. La cámara DCS de Kodak, sin embargo, cuesta entre tres y cuatro millones de pesetas y por el momento sólo está a disposición de los profesionales. Para imprimir posteriormente las imágenes se puede utilizar la impresora XL-7700 de Kodak.
Las cámaras completamente digitales, como las denominadas DCS o Photoman, pueden conectarse directamente al ordenador, pero las cámaras analógicas Ion de Can o ProMavica de Sony tienen que convertir la señal analógica en digital. Para ello es necesario disponer de una tarjeta gráfica en el microordenador. Por ello, Canon ofrece una tarjeta de digitalización (768x576 píxeles) para su instalación en PC junto con la cámara Ion RC-260 a unas 300.000 pesetas y el programa que necesita. A continuación estas imágenes se pueden extraer en la impresora en color láser, como el modelo CLC-500 de Can.
Está claro, por tanto, que la fotografía “química” nació hace unos 150 años. En el siglo XX el sistema será histórico y totalmente obsoleto.
Zu idazle
Zientzia aldizkaria
