Para saber la edad de la cerámica, fijarse en la humedad
Investigadores de las universidades de Manchester y Edimburgo han diseñado una nueva técnica para datar objetos arqueológicos de cerámica. Si bien esta técnica es adecuada para determinar la edad de los objetos de hace 2.000 años, los investigadores consideran que también puede ser capaz de datar objetos de 10.000 años.
Los objetos cerámicos son introducidos en la estructura a partir de su salida del horno. Así, a lo largo del tiempo, el objeto gana peso. Cuanto más viejo sea el material, más pesará, más agua tendrá.
Para su datación es imprescindible conocer la velocidad de reacción entre la cerámica y el agua a lo largo del tiempo. En este conocimiento se basa la nueva técnica de datación. Para ello, los investigadores pesan una muestra de cerámica tal cual y después de calentarla en un horno a unos 500 grados centígrados. Esta muestra se pesa en una microbalanza de alta precisión para conocer el agua que ha penetrado en la cerámica. Conociendo este dato se puede extrapolar la edad del objeto.
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