La Universidad de Cardiff ha utilizado nanopartículas de oro para activar el oxígeno a 60-80ºC. Con ello han conseguido que el proceso normal de elaboración de medicamentos, detergentes o aditivos alimentarios sea más limpio de lo normal. Estos productos se fabrican mediante un proceso de oxidación en el que se utilizan y producen sustancias nocivas para el medio ambiente. Sin embargo, el uso de nanopartículas de oro como catalizador hace que el proceso sea mucho más limpio.