Ingenieros químicos de la Universidad de Florida han diseñado lentes que faciliten el tratamiento de enfermedades oculares. El medicamento viaja a las nanopartículas internas de estas lentes especiales, lo que permite liberar lentamente el medicamento y obtener la cantidad necesaria.
En el tratamiento de enfermedades oculares, lo más habitual es tirar gotas de medicamentos. Pero no parece muy eficaz. De hecho, las lágrimas sólo hacen que el 5% del medicamento llegue al lugar que convenga. El medicamento tiene además efectos secundarios peligrosos. El medicamento baja a las fosas nasales y pasa a la sangre causando problemas cardíacos y otras consecuencias graves.
Por otro lado, para combatir las bacterias que se pueden acumular en el ojo, parece que también se pueden introducir antibióticos en las nanopartículas.
A largo plazo, las lentes de contacto con medicamentos esperan sustituir las gotas, pero todavía no son más que un diseño, ya que no se han realizado pruebas clínicas.