En la Universidad de Lausanne (Suiza) se ha identificado uno de los genes que contribuyó al desarrollo del cerebro de los grandes primates, incluido el humano. GLUD2 es un gen que codifica uno de los neurotransmisores cerebrales: el glutamato.
Al parecer, el gen GLUD2 provenía del GLUD1 y fue uno de los pasos que separó a los grandes primates de los monos más primitivos. Los primates grandes tienen estos dos genes, pero los monos sólo tienen GLUD1.
Este gen GLUD2 permitió, entre otras cosas, crear una red de neurotransmisores cerebrales más compleja en los primates grandes, desarrollando primates con mejor capacidad cognitiva y memoria.