Hasta hace poco Plutón era sólo un punto de luz espacial. La mejor foto así lo demostraba y no se podían apreciar detalles superficiales. Sin embargo, en julio de 2002 se puso en marcha una sesión de obtención de mejores, que duró hasta junio de 2003, en la que el Telescopio Hubble tomó las imágenes de Plutón con la mayor precisión posible, formando un mapa remoto de la superficie del planeta. Los astrónomos ya han empezado a especular con el significado de este mapa y han propuesto cuál puede ser la composición básica de Plutón. En cualquier caso, deberán esperar al menos unos años para que una sonda de la NASA pueda ser enviada a la zona del planeta para investigar adecuadamente su composición.