Investigadores de la Universidad Duke han realizado los vasos sanguíneos a partir de células musculares en la Carolina del Norte. Ya han realizado cuatro arterias de ocho centímetros de longitud y, si el método resulta seguro, puede convertirse en un recurso importante para la cirugía cardiaca.
(Foto: G. Roa).El procedimiento llama la atención que la adición de un gen llamado hTERT produce un aumento de las células musculares que prolonga la vida de la célula. Para que las células así cultivadas formen una estructura tubular, las introducen durante dos meses en un molde fabricado con un polímero biodegradable. Finalmente, mediante la adición de células que recubren la estructura se forman las arterias.
Los tubos criados con esta terapia no producirían rechazo, ya que se realizarían a partir del tejido muscular del paciente. Por otro lado, al crecer los vasos en el laboratorio, no habría problemas para la obtención de los vasos.