El reloj interior de los seres vivos está controlado por diferentes genes. Uno de ellos, el Clock, participa en la actividad circadiana, es decir, en un reloj biológico ligado al ciclo diurno-noche. Tras el descubrimiento del gen en 1997, el mismo equipo de investigadores ha encontrado una nueva característica relacionada con el gen Clock: que en caso de error provoca obesidad en el ratón.
La obesidad está relacionada con la dieta, pero según estos investigadores no sólo con ella. Los ratones con defectos en el gen Clock desarrollan la obesidad en todos los casos, independientemente de la dieta. La investigación se realizó con dos dietas, una rica en grasas y otra normal. Los ratones con mutaciones en el gen Clock desarrollaron la obesidad en ambos casos. Los ratones con mutación, además, dormían menos que los demás.
Como los ratones y los seres humanos tienen relojes circadianos similares, en el caso de los seres humanos los investigadores comienzan a investigar la relación entre el gen Clock y la obesidad. Además, tendrán que investigar muchas otras enfermedades, ya que el reloj interno influye en muchos ámbitos.