Existe un gran consenso entre los expertos sobre la capacidad del cerebro para clasificar las imágenes, y parece que las investigaciones todavía van a durar mucho.
De hecho, según el último estudio realizado por el equipo del Dr. James Haxby del Instituto Nacional de Salud Mental de Estados Unidos (NIMH), las hipótesis más complejas son correctas.
La actividad cognitiva no se limita sólo a una parte del cerebro, ni cada parte del mismo identifica una sola serie de objetos. Las representaciones mentales son consecuencia de las actividades localizadas y superpuestas del cerebro.