En nuestra vida cotidiana, los objetos complejos se fabrican a partir de piezas, una vez realizadas todas se montan para formar el objeto. Sin embargo, esto no es posible en el mundo cuántico: una operación cuántica global no puede incorporarse a una cadena de operaciones secuenciales. Las leyes básicas de la física lo prohíben. A esta conclusión ha llegado el equipo de investigadores del profesor Enrique Solano de la UPV, entre otros.