Geólogos de la Universidad de Hawaii han conseguido la imagen de una pluma de roca caliente que sale del profundo manto de la Tierra en las islas de Hawai. Según han indicado, este descubrimiento confirma que existen las plumas del manto.
Hasta el momento, los geólogos no han podido realizar un estudio directo en el manto y la existencia de plumas no era más que una sospecha, ya que los modelos teóricos y las investigaciones realizadas así lo sugerían. Para realizar mediciones directas, los investigadores de Hawai realizaron un experimento para medir los seísmos. Las ondas sísmicas se propagan más lentamente cuando atraviesan materiales calientes que cuando atraviesan frío.
Así, mediante la colocación de sensores en el fondo del océano para detectar la velocidad de propagación de las ondas sísmicas, han podido iluminar la estructura de la corteza terrestre y el manto terrestre de hasta 1.500 kilómetros de profundidad. Han visto, entre otras cosas, que a medida que se llega a la superficie terrestre la pluma se aplasta, y cuando le faltan unos 200 kilómetros para llegar a la superficie, adquiere forma de bollería. Allí los materiales se funden, se expanden y suben por las rendijas.