En los últimos 8-15 años el número de tiburones que habitan en el Atlántico ha descendido a la mitad. Investigadores de la Universidad de Dalhousie han estudiado nueve especies de tiburones del Atlántico noroccidental y han detectado una caída del 50% mínimo en todas ellas. Entre las especies analizadas se encuentran el tiburón blanco, el pez martillo y el tiburón azul.
Según los investigadores, este declive se debe a la sobrepesca, cuya tasa de natalidad no es suficiente para sustituir a las capturas. Sin embargo, se ha advertido que hay que prestar especial atención a los programas de conservación, ya que los esfuerzos de conservación de una sola especie en muchos casos llevan a la pesca de otra. Por ello, para un adecuado programa de conservación deben tenerse en cuenta todas las especies que habitan alrededor de los tiburones.