Según su comportamiento en campos magnéticos, los materiales superconductores se dividen en dos grupos. En los de primera clase, a baja temperatura, el campo magnético no llega al interior del material; en los de segunda, sí, crean turbulencias magnéticas en el interior del material. Los físicos de la Universidad Católica de Leuven en Bélgica, en colaboración con un grupo del Instituto Federal de Tecnología de Suiza, han encontrado un material que puede contener ambas conductas, el diboruro de magnesio. Dependiendo de la temperatura y de la zona, en algunas zonas se producen turbulencias magnéticas y en otras no.