Descubren el secreto de los microscopios revolucionarios de Leeuwenhoek

Etxebeste Aduriz, Egoitz

Elhuyar Zientzia

leeuwenhoeken-mikroskopio-iraultzaileen-sekretua-a
Ed. Delft University of Technology

Anton van Leeuwenhoe comenzó a ver cosas que nunca habían visto, en el XVII. En el siglo XX, gracias a sus microscopios. Los microscopios de la época obtenían 30 aumentos, mientras que Leeuwenhoek consiguió más de 200. El secreto estaba en las lentes, un secreto que se ha mantenido hasta hoy. En la ciudad natal de Leeuwenhoek, en la Universidad de Tecnología de Delft (Holanda), unos investigadores acaban de aclarar cómo hacía las lentes.

Realizó unos quinientos microscopios, de hecho muy básicos: lentes de vidrio muy pequeñas, cuanto más pequeñas mejor, insertadas en una lámina de latón, cobre o plata. No había luz lente si la hacía con vidrio pulido o soplado. El propio Leeuwenhoek nunca sugirió que inventó una nueva técnica para trabajar el vidrio soplando. Sin embargo, parece que intentaba guardar mejor el secreto.

Investigadores de Delft analizan un microscopio de Leeuwenhoek utilizando tomografía de neutrones. Gracias a esta última tecnología, han podido analizar la formación de su lente sin destruir ni dañar el microscopio. Y han descubierto que Leeuwenhoe era un gran pulidor de vidrio. Ahora quieren saber si utilizaba algún tipo de vidrio especial. Pronto lo descubrirán a través de la espectroscopia de gamma.

Babesleak
Eusko Jaurlaritzako Industria, Merkataritza eta Turismo Saila