La técnica desarrollada recientemente por los cirujanos ingleses para eliminar la vesícula supone una gran ventaja para muchas personas. Por un lado, el paciente tendrá menos tiempo y por otro, tendrá que permanecer menos tiempo en el hospital.
Cada año, en el Reino Unido, unas 100.000 personas se ven obligadas a someterse a esta operación. En el hospital hay que pasar 5 días y al haber sido cortados los músculos abdominales también hay que sufrir dolor. Por último, se necesitan cinco semanas para recuperarse completamente.
Mediante la técnica denominada "cerrajera zulo", los cirujanos utilizan el laparoscopio (tubo rígido que se introduce en el estómago y que tiene una pequeña cámara de televisión) y el láser en el corte. De esta forma, en lugar de recortar 14 cm, sólo hay que hacer unos pequeños orificios.
Este método permite que el paciente acuda al domicilio al día siguiente del corte.