Se sabe que el cuco pone sus huevos en el nido de otras especies de aves. La hembra de cuco busca los nidos de los pájaros de la especie que la crió, ya que este linaje del cuco pone huevos similares a los de un determinado hostelero. Pero, a pesar de ser similares, el pájaro huésped tiene estrategias para conocer huevos que no son suyos. La Universidad de Harvard ha desarrollado un software para investigar estas estrategias. Se llama NaturePatternMatch y se centra en el modelo de las cáscaras de huevo o las manchas.
Según los desarrolladores, las aves han tratado de fotografiar lo que ven. Para ello, las aves han fotografiado las longitudes de onda que ven y han utilizado un algoritmo de identificación del modelo de manchas. Se han analizado un total de 689 huevos, procedentes de la colección del Museo de la Historia Natural de Londres.
Atendiendo al conjunto de modelos recogidos, se han identificado tres tipos de estrategias que pueden utilizar los pájaros para separar los huevos de los cucos. Uno consiste en que todos los huevos de cada cría tengan el mismo modelo de manchas. El Antzandobi común, por ejemplo, tiene esa estrategia. Otra estrategia, como la del carracín de carricero, es la puesta por las hembras de la misma especie de huevos con modelos de manchas muy diferentes. Y la tercera estrategia es que el modelo es muy complejo: la cáscara de huevo de la cabaña de invierno, por ejemplo, tiene las manchas muy dispersas.
Con estas tres estrategias, los otros pájaros se hacen pasar por el truco del cuco: se dan cuenta de que en el nido hay un huevo que no es suyo y a veces lo echan.