Además, los investigadores han comprobado que la dieta rica en carnitina fomenta el crecimiento de las bacterias que metabolizan la carnitina, con lo que el daño se agrava aún más para los carnívoros, ya que produce más metabolitos nocivos que los que hacen una dieta libre de carnitina.De hecho, los investigadores han estudiado a voluntarios con tres tipos de dieta: omniboros que comían carne, hortícolas y veganos de origen animal. Y han demostrado que la relación entre el nivel de tma y el riesgo de sufrir ataques cardíacos y enfermedades del aparato circulatorio es “correcta”.
Por otro lado, los investigadores han destacado que los veganos y los vegetarianos producen mucho menos TMAO, tomando el mismo número de carnitinas. Los investigadores concluyen que “la dieta habitual prescribe qué tipo de bacterias tenemos en el intestino”, lo que repercute directamente en la salud.
Al parecer, este estudio explica por qué la carne roja tiene tan malas consecuencias para el aparato circulatorio, el colesterol y las grasas saturadas, ya que su riqueza no explicaba totalmente su nocividad. Se ha advertido que los resultados son de consideración no sólo para los que comen mucha carne roja sino también para los que consumen bebidas energéticas y aditivos de carnitina.