Los expertos no pensaban que en los cúmulos de estrellas globulares, en los densos conjuntos formados por miles de estrellas viejas, los agujeros negros podrían sobrevivir, tal y como indicaban los simulacros de ordenador. Se calcula que si surgiera un agujero negro, al principio se dirigiría hacia el centro del cúmulo, pero enseguida sería eliminado por las interacciones gravitatorias del gran grupo de estrellas. Sin embargo, los astrónomos de la Universidad de Southampton han visto la huella de un agujero negro en un cúmulo de estrellas. Han llegado a la conclusión de que los agujeros negros no sólo pueden perdurar sino crecer y avanzar en los cúmulos.