Se dice que el erizo de mar puede llegar a los doscientos años, salvo que lo recojan antes para hacer sushi. Hasta ahora se consideraba que vivía unos quince años. Para llegar a esta conclusión han combinado dos métodos: por un lado, han marcado con tetraciclina unos mil quinientos erizos de mar y, por otro, han utilizado la prueba de carbono 14.
La tetraciclina se adhiere al esqueleto, lo que permite medir el crecimiento del erizo de mar durante un año. Según han visto, en los primeros diez años crece rápido, pero luego mucho más lento. El conjunto del erizo de mar tiene una longitud mínima de 8 centímetros y tarda unos seis años en alcanzar esta medida. Sin embargo, han llegado a la conclusión de que el tamaño de los grandes erizos de mar de casi veinte centímetros de altura puede rondar los doscientos años.
La prueba de Carbono 14 ha permitido diferenciar a los nacidos antes de los 50, ya que las armas nucleares que se emplearon en aquella época aumentaron considerablemente la cantidad de carbono 14 en poco tiempo.
No obstante, algunos expertos han solicitado una investigación más exhaustiva, ya que este tipo de conclusiones requieren de más datos como base.